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Por Lindsay Dunsmuir
30 nov (Reuters) -El presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Jerome Powell, dijo el martes que el banco central debería considerar acelerar la liquidación de sus compras de bonos a gran escala en su próxima reunión de política monetaria en dos semanas, en medio de una sólida economía y expectativas de que un aumento en la inflación persistirá hacia mediados del próximo año.
Powell combinó sus comentarios, descritos por algunos analistas como "sorprendentemente agresivos", con una caracterización del riesgo económico de una nueva variante de COVID-19 -que ha desconcertado a las autoridades del banco central y los mercados financieros globales en los últimos días- como no comparable a la primavera boreal de 2020 cuando estalló la pandemia.
De hecho, el jefe de la Fed dijo a la Comisión de Banca del Senado que la economía de Estados Unidos sigue fortaleciéndose, el crecimiento del empleo continúa siendo robusto y que se espera que la alta inflación, ahora en más del doble del objetivo flexible de la Fed del 2% anual, persista más de lo que él y otros de sus colegas esperaban.
También reconoció que su término preferido para describir la inflación como un fenómeno pasajero -"transitorio"- probablemente debería ser "retirado", sugiriendo que las autoridades de la Fed haría un esfuerzo más concertado para frenar los aumentos de precios en los próximos meses.
"En este punto, la economía está muy fuerte y las presiones inflacionarias son altas y, por lo tanto, en mi opinión es apropiado considerar terminar la reducción de nuestras compras de activos, que de hecho anunciamos en la reunión de noviembre, quizás unos meses antes, y espero que lo discutamos en nuestra próxima reunión en un par de semanas", dijo Powell en la audiencia conjunta con la secretaria del Tesoro, Janet Yellen.
La Fed comenzó a reducir su apoyo a la economía este mes, y actualmente está en camino de terminar completamente sus 120.000 millones de dólares en compras mensuales de bonos del Tesoro y valores respaldados por hipotecas para el próximo junio. El programa se introdujo a principios de 2020 para ayudar a apuntalar a la economía durante la pandemia de COVID-19.
Varias autoridades de la Fed habían abogado previamente porque el banco central acelerara ese ritmo para terminar las compras en algún momento de la primavera boreal y permitir un inicio más temprano de las alzas de tasas de interés en caso de que fueran necesarias para controlar la inflación.
Los comentarios de Powell parecen sugerir que está listo para unirse a esos colegas para favorecer una liquidación más rápida de las compras de activos.
Los hizo mientras los mercados financieros continuaban viéndose afectados por la aparición de una nueva variante del coronavirus que puede ser resistente a las vacunas. Eso llevó a los mercados a retrasar el cronograma percibido para el inicio de las subidas de tasas.
Pero los comentarios de Powell sobre un ritmo de reducción de compra de activos más rápido y la inflación persistiendo "bien dentro" de 2022 revirtieron parte de ese impulso e hicieron subir los rendimientos de los bonos.
RIESGOS DE ÓMICRON
Los funcionarios de salud están apresurados para determinar qué tan transmisible y mortal es la nueva variante ómicron y hasta qué punto las vacunas actuales siguen siendo protectoras. Estados Unidos ha impuesto una prohibición de viajar sobre algunos países del sur de África donde prevalece la cepa.
La variante delta del COVID-19, ahora dominante, afectó la economía de Estados Unidos durante el verano boreal, desacelerando las ganancias de empleo en medio de los temores de los trabajadores de contraer el virus y exacerbando los problemas de la cadena de suministro que han acelerado la inflación.
"Realmente se trata de la transmisibilidad, se trata de la capacidad de las vacunas para abordar cualquier variante nueva, se trata de la gravedad de la enfermedad una vez que se contrae... Me han dicho expertos que sabremos más sobre esas preguntas dentro de alrededor de un mes", dijo Powell. "Sin embargo, sabremos algo dentro de una semana a 10 días".
"Entonces, y solo entonces, podremos hacer una evaluación de cuál sería el impacto en la economía... Por ahora, es un riesgo para el escenario base, no está realmente incluido en nuestro pronóstico".
(Reporte de Lindsay Dunsmuir y Ann Saphir, Editado en Español por Manuel Farías)