Pontevedra, 8 feb (.).- El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, ha pedido este miércoles al Ayuntamiento de Pontevedra que cese en su "acoso" a la empresa de celulosas Ence (BME:ENC) para que sus trabajadores puedan tener "paz y tranquilidad" tras años de "mucha incertidumbre".
Tras un acto sobre empleo juvenil en Pontevedra, Rueda ha destacado que visto el "pronunciamiento claro" del Tribunal Supremo sobre la fábrica pastera, ha quedado demostrado que todos ellos "no tenían que haber pasado por estos años de sufrimiento".
De ahí que el presidente gallego haya reclamado a las administraciones que impulsaron los procesos judiciales contra la prórroga concedida por el Gobierno a Ence en 2016 que "si tienen pensado hacer algún tipo de acoso, que no lo hagan".
"Espero que a partir de ahora tengan garantizado su futuro", ha destacado el titular de la Xunta, que ha sostenido que el Ayuntamiento de Pontevedra "debería entender que todo tiene un principio y un final", al que se llega tras una sentencia "categórica" del Supremo.
Ence y sus trabajadores, según Rueda, "tienen derecho" tras todo este proceso judicial "a tener un poco de paz y tranquilidad para trabajar y desarrollar su vida en Pontevedra", una ciudad que, ha añadido, "necesita empleo e industria" para que pueda "tener futuro".
Tras el fallo judicial "hay que aceptar lo que se ha dicho", ha reiterado el presidente de la Xunta, que ha agradecido el cambio de postura del PSOE "porque entienden que tiene que cesar la puesta en duda constante que condiciona tanto el futuro de los puestos de trabajo".
"Dicen que hay que respetar la sentencia y mirar hacia adelante. Es lo que hay que hacer y es de agradecer", ha subrayado Rueda, que por el contrario ha censurado que desde el BNG "siempre descalifiquen a los jueces" cuando sus decisiones "no coinciden con sus postulados".
Una vez asegurada la continuidad de Ence, ha dicho el presidente autonómico, desde la Xunta exigirán a la empresa que "cumpla con los compromisos que tenía suspendidos", entre ellos su plan social, y que sigan respetando "hasta el final" toda la normativa ambiental.
En el gobierno gallego, ha sentenciado, "estaremos muy pendientes" de que la compañía pastera cumpla todos los compromisos firmados y, a este respecto, ha advertido de que "seremos inflexibles en el cumplimiento de todo lo que tenga que cumplir la fábrica de Lourizán".
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