Río de Janeiro, 12 jun (.).- El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, ha presentado este miércoles las oportunidades de inversión que ofrece su país a empresarios de Arabia Saudí, a los que ha instado a fortalecer las relaciones en el marco del eje sur-sur y el foro BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica).
Lula ha destacado el reciente ingreso de Arabia Saudí, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, Etiopía e Irán al grupo BRICS; y ha afirmado que puede ser la base para la creación de un "nuevo modelo" de relación económica entre los países emergentes.
"Existe un gran potencial de ganancias recíprocas y podemos ser un ejemplo de la relación sur-sur", porque "diversificar nuestras economías es lo que nos mueve", ha declarado Lula en el evento, organizado en Río de Janeiro por el Fondo de Inversiones Públicas de Arabia Saudí.
También ha hecho un largo repaso de las oportunidades que Brasil ofrece para la inversión extranjera en un marco -ha asegurado- de "garantías" y "estabilidad" institucional, política, jurídica y normativa.
Lula ha afirmado que Brasil "ha recuperado el camino del crecimiento", ya que el producto interior bruto (PIB) del país se ha expandido en los últimos doce meses un 2,5 %, lo que le sitúa en el camino de "ser la octava economía del mundo y quizá la sexta".
Entre las oportunidades de inversión para el capital extranjero, el mandatario ha citado vastos programas de infraestructura que desarrolla su Gobierno y ha enfatizado, sobre todo, el potencial que tiene Brasil en el plano de energías limpias que allanen el terreno para la transición hacia un modelo "más sustentable" y "respetuoso" con la naturaleza.
"Brasil se presenta como un puerto seguro", como un país "amante de la paz y que dialoga con todos los que quieran contribuir al progreso del mundo, construyendo puentes y recortando distancias", ha asegurado.
Ha agregado que ese crecimiento económico sólo podrá ser posible si está volcado a la inclusión de las mayorías más pobres del planeta.
"Los problemas sociales existen y están en las calles de este mundo extraordinario y digitalizado, que todavía permite que 735 millones de personas vayan a dormir sin tener qué comer, cuando hay un conocimiento genético capaz de producir alimentos para todos", ha lamentado.