(Actualiza la EC5168 con datos del informe elaborado por el auditor)
Madrid, 25 sep (.).- Las acciones del grupo de restauración Amrest se movían en mínimos en la sesión bursátil de este viernes después de que la compañía anunciara que sus pérdidas se dispararon hasta los 162 millones de euros durante el primer semestre del año, como consecuencia de la covid-19.
Los títulos de la firma -de origen polaco, pero con sede en España- bajan a esta hora un 2,85 %, hasta 3,745 euros, lejos de los 10 euros a los que cotizaba hace un año.
El desplome bursátil se produce después de que la empresa enviara su informe de resultados semestral a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en el que se recuerda que de enero a junio de 2019 la firma ganó 11 millones de euros, y en el en el que también se incluyen advertencias sobre su viabilidad por parte del auditor.
En el segundo trimestre de 2020 sus pérdidas se agravaron hasta los 120 millones, con lo que tras acabar enero-marzo con números rojos de 42 millones, el resultado negativo en el primer semestre se situó en 162 millones.
La empresa, controlada por la mexicana Finaccess (propiedad del magnate Carlos Fernández) y con cerca de 44.000 empleados en el mundo, registró un descenso de su facturación del 35 % respecto al año anterior, hasta los 684 millones, debido al cierre temporal de buena parte de sus establecimientos mundiales por la pandemia de coronavirus.
El grupo gestiona actualmente 2.318 establecimientos -entre propios y franquiciados- tras cerrar definitivamente una veintena respecto a finales de 2019, bajo marcas como La Tagliatella, Bacoa, Blue Frog y Sushi Shop, pero también en calidad de máster franquiciado con las enseñas Burger King, Pizza Hut y Starbacks.
Su ebitda acabó junio en 64,6 millones de euros, un 60 % menos con respecto a hace un año.
En el informe, la empresa ha explicado que realizó un análisis de deterioro de sus activos que confirmó una bajada del valor contable de dos de sus negocios: la cadena de hamburgueserías Bacoa en España (con pérdidas por deterioro de 3,6 millones) y Starbucks (NASDAQ:SBUX) en Alemania.
Las inversiones cayeron un 55 % respecto a la primera mitad de 2019, hasta 36,2 millones de euros, y su deuda neta aumentó más de un 2 %, hasta 611,6 millones.
Los responsables de Amrest han recordado que la compañía incumplió una de las condiciones acordadas con sus acreedores financieros, aunque obtuvo el pasado 1 de septiembre una "carta de dispensa" por parte de estas entidades.
En el informe elaborado por el auditor tras revisar sus cuentas semestrales, KPMG advierte de que este incumplimiento ha provocado que ese préstamo haya sido clasificado como pasivo.
"El pasivo corriente del grupo excede el activo en 770,8 millones de euros a 30 de junio de 2020. Esta situación indica la existencia de una incertidumbre material que puede generar dudas significativas sobre la capacidad del grupo para continuar como empresa en funcionamiento", señala el documento.
Además, la empresa ha solicitado préstamos bancarios en España y Francia con garantía estatal, lo que le ha permitido recibir por esta vía 75 millones de euros adicionales.
Los directivos de Amrest han recordado que también han "revisado" los contratos de alquiler por la caída de la actividad y han reconocido que no se pueden "calcular de manera fiable" los efectos de la pandemia, que pueden tener "un efecto sustancial adverso" en sus resultados.