Avilés (Asturias), 17 feb (.).- La aprobación de una ayuda de 460 millones de euros a ArcelorMittal (BME:MTS) para la descarbonización es un hecho positivo que permite avanzar en sus planes en España, según ha explicado este viernes la empresa siderúrgica a Efe.
La Comisión Europea (CE) ha aprobado este viernes una ayuda pública española de 460 millones de euros para ayudar a ArcelorMittal a construir en Asturias una planta de hierro de reducción directa a base de hidrógeno renovable y desarrollar un plan de descarbonización en el que prevé invertir en torno a 1.000 millones de euros.
ArcelorMittal ha hecho esta declaración tras haber arrancado el Horno Alto A de Veriña, en Gijón, el pasado 6 de febrero, junto al Sínter B, con la nueva chimenea para mejorar la dispersión de partículas, después de valorar una ligera mejoría del mercando, aunque todavía con baja demanda.
El horno arrancó con una producción reducida adaptada al mercado, junto al Sínter B que le dará soporte, según las mismas fuentes, que han precisado que los 250 trabajadores adscritos a estas instalaciones ya están entregados a la tarea de la reactivación.
La siderúrgica tiene en vigor hasta el próximo 31 de marzo un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que aplica en función de la evolución de las necesidades del mercado y, en consecuencia, se adaptará a esta nueva circunstancia.
Ante esa “recuperación, aunque débil, del mercado”, la empresa sacará del ERTE a la plantilla necesaria para la reactivación de estas instalaciones y su posterior mantenimiento.
La mayor afectación sobre el resto de las instalaciones siderúrgicas del cierre del horno, que se produjo a finales del pasado mes de setiembre, estuvo en Acería de Avilés, el Tren de Bandas en Caliente y la división de Laminación en Frío.
La dirección de ArcelorMittal tomó la decisión de la parada temporal de su Horno Alto A debido a la situación de la demanda del mercado y las previsiones inmediatas.
La siderúrgica entendió entonces que la situación del mercado del acero en Europa era muy adversa por los altos niveles de importaciones extracomunitarias y la reducida demanda.
La vida útil de ese horno finaliza en septiembre del próximo año y la idea de la empresa es que sea sustituido por una planta de reducción de mineral de hierro.
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