Nueva York, 24 abr (.).- El fabricante de aviones Boeing (NYSE:BA) anunció este miércoles unas pérdidas de 355 millones de dólares (unos 332 millones de euros) en el primer trimestre del año, un 16 % menos que en el mismo periodo de 2023, pese a la crisis que atraviesa tras una serie de incidentes en varios de sus aviones.
No obstante, los ingresos de la compañía se redujeron un 8 % con respecto a enero y marzo de 2022, situándose en los 16.569 millones de dólares, según anota la empresa en un comunicado.
La compañía está en el punto de mira desde que a principios de enero pasado un panel que cubría el espacio para una puerta de emergencia de un Boeing 737 Max-9 operado por Alaska Airlines (NYSE:ALK) se desprendiera poco después de su despegue.
Tras el suceso, la Administración Federal de Aviación (FAA, en sus siglas en inglés) inició una serie de investigaciones y descubrió sendos problemas de calidad tanto en Boeing como en Spirit AeroSystems, su proveedor.
Este incidente ha ralentizado la producción del modelo 737 hasta una cifra por debajo de 38 aviones al mes para incorporar mejoras de calidad, según ha informado la compañía, lo que ha hecho bajar el total de entregas a 83 (de todos los modelos), frente a los 130 aviones suministrados en el primer trimestre de 2023.
En este sentido, los ingresos procedentes de su unidad de aviones comerciales cayeron un 31 % con respecto al año pasado, hasta los 4.653 millones de dólares.
"Nos tomaremos el tiempo necesario para reforzar nuestros sistemas de gestión de calidad y seguridad", dijo al respecto el presidente y consejero delegado de Boeing, Dave Calhoun, que recientemente anunció su salida de la empresa a finales de este año.
Por otra parte, la unidad de Defensa, Espacio y Seguridad de la compañía aumentó sus ingresos un 6 % en el primer trimestre, hasta 6.950 millones de dólares, destacando la adjudicación de 17 aviones P-8A Poseidon para la Real Fuerza Aérea Canadiense y la Marina Alemana.
Mientras, su negocio de Servicios Globales aumentó también su facturación un 7 %, hasta 5.045 millones de dólares, gracias a un mayor volumen comercial.
Los resultados superaron las expectativas de los inversores y en los primeros compases de la bolsa de Wall Street las acciones de Boeing subían un 3 %.