Bruselas, 20 jul (.).- La Comisión Europea aprobó este jueves los planes notificados por Alemania y Francia para apoyar con recursos públicos a ThyssenKrupp (ETR:TKAG) y ArcelorMittal (BME:MTS), respectivamente, en sus estrategias para descarbonizar los procesos industriales de plantas en ambos países, informó la institución en un comunicado.
El plan alemán está destinado a la planta de la compañía en Duisburg y se divide en dos partes: una ayuda directa de 550 millones de euros para descarbonizar los procesos de producción de acero y un "mecanismo de pago condicionado" de 1.450 millones para acelerar la utilización de hidrógeno renovable.
En particular, la ayuda directa financiará la construcción e instalación de una planta de reducción directa y dos unidades de soldadura que sustituirán el actual alto horno de la planta. Además, el gas natural que se utiliza actualmente será retirado gradualmente y la planta operará desde 2037 sólo con hidrógeno renovable.
El pago condicionado cubrirá, durante los primeros diez años de actividad de la nueva planta, los costes adicionales derivados del uso de hidrógeno renovable en lugar de hidrógeno procedente de combustibles fósiles.
Berlín y la compañía esperan que las nuevas instalaciones inicien su actividad en 2026 y produzcan 2,3 millones de toneladas de metal caliente al año con una huella de carbono "reducida". Un vez completado, creen que el proyecto podría evitar la liberación de 58 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera.
En segundo lugar, Bruselas dio luz verde a Francia para que apoye a ArcelorMittal a descarbonizar, en este caso de forma "parcial", la producción de acero de su planta en Dunkerque, que opera en la actualidad con tres altos hornos y tres de oxígeno básico
El apoyo público servirá para impulsar la construcción de una planta de reducción directa y dos hornos eléctricos de arco que sustituirán a dos de los tres altos hornos y dos de los tres hornos de oxígeno básico.
Además, el gas natural que se use inicialmente en la planta de reducción directa será retirado gradualmente de los procesos de producción de gas hasta que la actividad utilice exclusivamente hidrógeno de bajas emisiones, biogás y electricidad.
La ayuda tomará la forma de transferencia directa y será pagada en cuatro desembolsos entre 2023 y 2026, año en que la nueva planta será operativa. París y la siderúrgica calculan que podrá producir 4 millones de toneladas de acero líquido al año y evitar la liberación de 70 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera en los próximos 15 años.
Tanto ThyssenKrupp como ArcelorMittal se han comprometido a compartir "activamente" la experiencia y el conocimiento técnico ganados a través de sus proyectos con el resto de la industria y el mundo académico.
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