Bruselas, 28 jul (.).- La Comisión Europea (CE) paralizó este viernes temporalmente la investigación en profundidad abierta para determinar si aprueba o veta la fusión de Orange (EPA:ORAN) y MásMóvil (BME:MASM), a la espera de que se le facilite información adicional sobre la operación.
"El 28 de julio de 2023, la Comisión detuvo el reloj en su investigación en profundidad sobre la empresa conjunta propuesta entre Orange y MásMóvil, con efecto a partir de hoy", indicó a EFE la portavoz de la CE Arianna Podesta.
Añadió que esa decisión se toma si las partes de una fusión no proporcionan "a su debido tiempo" una "información importante que la Comisión les ha solicitado".
"Para cumplir con los plazos de fusión, las partes deben proporcionar la información necesaria para la investigación a su debido tiempo. De lo contrario, la Comisión detendrá el reloj", detalló.
Aseguró que cuando las partes suministren la información que falta, la investigación se reanudará y la fecha límite para que la Comisión tome una decisión sobre si acepta o rechaza la fusión se ajustará "en consecuencia".
Hasta ahora, la fecha límite era el próximo 4 de septiembre.
A principios de abril, el Ejecutivo comunitario abrió una investigación en profundidad sobre la fusión entre Orange y MásMóvil, y dijo que le preocupaba que la operación "pueda reducir la competencia en la prestación minorista de servicios de banda ancha móvil y fija y en la oferta de paquetes de servicios múltiples en España".
A finales de abril, amplió hasta el 4 de septiembre el plazo para decidir si daba luz verde o impedía la fusión de las dos empresas telefónicas.
"El plazo legal provisional para una decisión final en este caso es el 4 de septiembre de 2023", dijo entonces a EFE una portavoz del Ejecutivo comunitario, al precisar que se había ampliado exactamente "en 10 días laborables adicionales".
En junio, el Ejecutivo comunitario advirtió a Orange y MásMóvil de que su fusión puede reducir la competencia en el sector minorista de servicios de telecomunicaciones móviles y fijas a través de una menor "presión competitiva" en el mercado derivada de la salida de un "rival innovador".
El miércoles pasado, Orange indicó que estaba discutiendo con la Comisión Europea remedios para que Bruselas aprobara su fusión con MasMóvil en España, lo que podría suponer en particular la cesión de activos en el negocio minorista, que es el que plantea problemas en términos de competencia.