Barcelona, 30 may (.).- Cirsa Gaming Corporation, primera compañía española del sector del juego, ahora en manos del fondo norteamericano Blackstone (NYSE:BX), ha obtenido un beneficio operativo de 106,8 millones de euros en el primer trimestre del año, un 0,7 % más que en el mismo período de 2017.
En un comunicado, Cirsa destaca que ha conseguido mejorar su resultado a pesar del impacto negativo de 16,1 millones de euros que ha registrado como consecuencia de la devaluación del conjunto de divisas latinoamericanas frente al euro.
La multinacional, que tiene su sede en Terrassa (Barcelona), ha logrado asimismo unos ingresos de explotación de 423,5 millones hasta marzo, un 0,16 % inferiores a los del año anterior, aunque van en línea con los objetivos marcados en el plan estratégico.
La división de casinos, una de las más importantes de Cirsa, ha crecido en ingresos y ebitda en moneda local en todos los países en los que opera y ha incorporado hasta marzo un total de 23 nuevos establecimientos en Perú, Panamá, Colombia y Costa Rica.
El negocio de "slots", que aglutina las máquinas recreativas, también ha aumentado su facturación, mientras que los bingos mantienen una tendencia positiva gracias al incremento de visitas.
En estos tres primeros meses del año también han registrado una evolución positiva las otras unidades de negocio de Cirsa, como son el área B2B, relacionada con el diseño y producción de máquinas para bares, bingos y casinos, los salones de juego y Sportium, que concentra el negocio de las apuestas deportivas.
La oferta de Cirsa está compuesta por 147 casinos, más de 75.000 máquinas recreativas, 70 salas de bingo, 178 salones de juego y 2.000 puntos de apuestas deportivas en España, Italia y Latinoamérica.
La compañía, que también desarrolla la actividad juego online en España, Colombia y Panamá, fue adquirida el pasado abril por el fondo de inversión norteamericano Blackstone, que compró a Manuel Lao Hernández el cien por cien de Cirsa Gaming Corporation.
La operación, no obstante, no incluía el negocio en Argentina, que seguirá gestionado por el empresario español.
La compañía catalana cuenta con 18.000 empleados en todo el mundo y cerró 2017 con un beneficio operativo de 427 millones de euros, un 7,2 % más, mientras que sus ingresos de explotación aumentaron un 6,4 %, hasta los 1.716 millones.