HOUSTON - Coya Therapeutics, Inc. (NASDAQ: COYA), empresa biotecnológica especializada en la mejora de la función de las células T reguladoras, ha anunciado hoy datos clave sobre biomarcadores en la Conferencia de la Sociedad de Farmacología Neuroinmune. Los datos subrayan el potencial de los niveles de 4-hidroxinonenal (4-HNE) como marcador predictivo de la progresión de la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y la supervivencia de los pacientes.
El estudio, en el que participaron 50 pacientes con ELA de una cohorte de registro longitudinal de pacientes, reveló que los niveles de 4-HNE en suero son significativamente superiores en los pacientes con ELA en comparación con los controles sanos. Además, estos niveles mostraron una fuerte correlación con la tasa de progresión de la enfermedad y la supervivencia, con una sensibilidad del 91,7% y una especificidad del 71,1% en la predicción de la supervivencia a 24 meses basada en un nivel umbral de 4-HNE.
La investigación de Coya sugiere que el 4-HNE podría ser un biomarcador sustitutivo valioso para seguir la eficacia de los tratamientos modificadores de la ELA. Esto incluye COYA 302, una terapia combinada de dosis bajas de interleucina-2 e Ig CTLA-4, que en un estudio de prueba de concepto pareció reducir los niveles de 4-HNE y otros biomarcadores proinflamatorios.
El Dr. Stanley Appel, Presidente del Consejo Científico Asesor de Coya, se mostró optimista sobre la correlación del 4-HNE con la progresión de la enfermedad y la supervivencia de los pacientes, lo que respalda su importancia potencial como biomarcador. A la luz de la solidez de los datos del biomarcador, Coya tiene previsto entablar conversaciones con la FDA para discutir la validación del 4-HNE como un nuevo biomarcador potencial para la predicción de la progresión y la supervivencia de la ELA.
La ELA, también conocida como enfermedad de Lou Gehrig, es una enfermedad neurológica rara y progresiva que no tiene cura y cuyas opciones de tratamiento son limitadas. Afecta a las neuronas motoras y provoca debilidad muscular, atrofia y, finalmente, insuficiencia respiratoria. La progresión de la enfermedad suele controlarse mediante la Escala Revisada de Valoración Funcional de la ELA (ALSFRS-R).
Coya Therapeutics se ha comprometido a desarrollar tratamientos contra la inflamación sistémica y la neuroinflamación. Su principal producto en investigación, COYA 302, tiene por objeto potenciar la función antiinflamatoria de las células T reguladoras y suprimir la inflamación producida por monocitos y macrófagos activados.
La empresa está desarrollando el COYA 302 para diversas enfermedades neurodegenerativas, como la ELA, la demencia frontotemporal, la enfermedad de Parkinson y la enfermedad de Alzheimer.
La información presentada en este artículo se basa en un comunicado de prensa de Coya Therapeutics.
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