Roma, 29 abr (.).- El banco italiano Carige, intervenido en 2019 por el Banco Central Europeo (BCE) por sus problemas económicos y salvado a finales de ese año por un grupo de inversores privados, ha propuesto hoy ejecutar una agrupación de acciones o "contra-split", a razón de un título por cada mil.
El banco sugiere en una nota agrupar acciones ordinarias y de ahorro en la proporción de 1.000 acciones por cada nuevo título, una iniciativa que será votada por la junta de accionistas el próximo 29 de mayo.
Se trata de una medida funcional en vista de una "posible readmisión futura de las acciones" en la Bolsa de Milán, donde cotizaba hasta el pasado enero, cuando puso en marcha una ampliación de capital de 700 millones de euros.
Si la junta de accionistas da luz verde, se llevará a cabo antes de final de este año, se lee en la nota de esta antigua caja de ahorros genovesa.
Carige, uno de los bancos más antiguos de Italia, fue intervenido por el BCE en enero después de que su junta de accionistas fuera incapaz de aprobar una emisión de bonos y una ampliación de 400 millones de euros.
Tras meses negociando alternativas, los administradores temporales llegaron a un acuerdo con el Fondo Interbancario de Garantía de Depósitos (FITD), la Cassa Centrale Banca-Crédito Cooperativo Italiano (CCB (HK:0939)) y otras instituciones financieras para salvar al banco.
Carige aprobó en diciembre de 2019 una ampliación de capital de 700 millones de euros y se comprometió a deshacerse de 2.800 millones de euros en créditos morosos (NPL) y a emitir 200 millones de obligaciones subordinadas con un ratio de solvencia Tier2.