Investing.com - El IBEX 35 ha subido un 1,42% en una sesión marcada por el discurso del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi. De este modo, el selectivo ha puesto fin a la jornada en los 10.584,1 puntos, una cota que no alcanzaba desde mayo de 2011.
Las entidades financieras han acaparado las mayores subidas del día, con Bankinter (BKT.MADRID) creciendo por encima del 4%, seguido por el Banco Popular (POP.MADRID), BBVA (BBVA.MADRID), Bankia (BKIA.MADRID) y Banco Santander (SAN.MADRID). Por el contrario, entre las que no se han sumado a la fiesta destacan Gamesa (GAM.MADRID), Amadeus (AMA.MADRID) y Ebro Foods (EBRO.MADRID).
Hoy era el día que los mercados llevaban esperando más de una semana. El máximo órgano de gobierno del BCE se reunió, optó por mantener los tipos de interés en el 0,25% y en la posterior rueda de prensa Mario Draghi dejó la puerta abierta a una posible puesta en marcha en el futuro de un plan de estímulo para la economía europea.
La jornada empezó bien, con las noticias de que el Gobierno chino ha aprobado nuevas medidas de crecimiento y siguió aún mejor, con una subasta del Tesoro histórica, por los bajos intereses a los que se colocó la deuda. Este último hecho llevó al Ibex a superarya a media mañana su mejor marca anual, situada en los 10.525 puntos.
Después de la subasta y hasta el comienzo de la comparecencia de Draghi se registraron algunas tímidas tomas de beneficios antes de que comenzara la fiesta de verdad. Mario habló y el mercado respondió con entusiasmo, llegando a cuajar unas ganancias cercanas al 1% en escasos 60 minutos y superar incluso la zona de los 10.600 puntos.
De este modo, España lideró de nuevo los números verdes entre las principales plazas europeas, seguida por el FTSE Mib de Milán (+1,38%), el Euro Stoxx 50 (+0,61%), el Cac parisino (+0,42%) y el Dax germano (+0,06%). Londres, más ajena a los dimes y diretes del BCE, veía como el FTSE 100 cedía un 0,15%.
En relación a la renta fija, la buena emisión de deuda a medio y largo plazo del Tesoro se tradujo en movimiento a la baja de los tipos de las obligaciones a 10 diez años ya en circulación, hasta los 3,225%, lo que permitió a la prima de riesgo relajarse hasta los 162 puntos.