PARÍS, 14 oct (Reuters) - El sindicato francés CGT, protagonista de una huelga de varias semanas en la petrolera TotalEnergies, abandonó el jueves por la noche la mesa de negociación salarial, reduciendo las esperanzas de que se ponga fin a una situación de bloqueo que ha perturbado la vida cotidiana de Francia al vaciar sus gasolineras.
"Hemos asistido a una mascarada (...), las ofertas que hay sobre la mesa son claramente insuficientes", declaró a los periodistas tras abandonar las conversaciones Alexis Antonioli, representante de la CGT.
Unas horas más tarde, los sindicatos CFDT y CFE-CGC, que representan a la mayoría de los trabajadores, llegaron a un acuerdo con TotalEnergies que, de ser aprobado por los miembros de ambos sindicatos, supondría un aumento salarial del 7% y una paga extra.
La CGT había manifestado anteriormente que quería un aumento salarial del 10%, señalando la inflación y los beneficios extraordinarios obtenidos por la empresa como consecuencia de la crisis energética mundial.
"Esto no cambia nada para la mentalidad de los trabajadores en huelga", dijo Antonioli, cuando se le preguntó si un acuerdo salarial sin la CGT similar al alcanzado recientemente en Esso France, filial de la estadounidense ExxonMobil (NYSE:XOM) , podría frenar las protestas.
La ministra de Energía francesa, Agnès Pannier-Runacher, afirmó el viernes que se necesita un acuerdo con urgencia, pidiendo a los jefes de TotalEnergies y a los representantes de la CGT que prosigan las conversaciones a pesar del desacuerdo.
"La empresa está en buena forma y los accionistas han sido recompensados durante mucho tiempo", dijo a la radio Franceinfo Philippe Martines, jefe del sindicato CGT.
La CGT pretende utilizar las protestas de los trabajadores de las refinerías como punto de partida para una acción industrial a nivel nacional en todos los sectores, que podría obstaculizar partes de la infraestructura del país este otoño.
Ya están en marcha huelgas en algunos de los reactores nucleares de EDF (EPA:EDF) , y las ramas sindicales de los sectores ferroviario y automovilístico anunciaron que participarán en una huelga más amplia prevista para el próximo martes.
El jueves, TotalEnergies se ofreció a mantener negociaciones salariales a pesar de las huelgas en curso, menos de un día después de que el Gobierno del presidente Emmanuel Macron dijera al grupo, que ha obtenido beneficios extraordinarios mientras los precios de la energía se han disparado, que pague más a sus trabajadores.
(Información de Jean Terzian y Tassilo Hummel; edición de Benoit Van Overstraeten y Jan Harvey; traducción de Darío Fernández)