DXC Technology (NYSE:DXC) ha experimentado hoy un importante descenso del 12% en el precio de sus acciones tras el anuncio de que Mike Salvino ha dimitido de sus cargos de Presidente y Consejero Delegado, con efecto inmediato. Raúl Fernández, miembro del consejo de administración de la empresa, ocupará temporalmente el cargo de Presidente y Consejero Delegado mientras la empresa busca un sucesor permanente, considerando candidatos tanto internos como externos. David Herzog, Principal Director Independiente, asumirá el cargo de Presidente.
Los analistas de Citi han aportado su visión sobre el asunto, señalando que la marcha de Salvino, descrita como un despido sin motivo específico, no parece deberse a ningún problema o preocupación de fondo. Propusieron que un posible motivo de la marcha podría ser cierto grado de insatisfacción con el ritmo al que la empresa está retomando el crecimiento.
"La empresa también reafirmó sus previsiones financieras del tercer trimestre para el ejercicio fiscal 2024, pero sólo se reconfirmó la previsión de Flujo de Caja Libre para todo el ejercicio fiscal 2024, lo que puede hacer que los inversores se preocupen por la posibilidad de que se rebajen las previsiones de ingresos, márgenes de beneficio y Beneficios por Acción para todo el ejercicio fiscal 2024. Creemos que esto introduce un elemento adicional de incertidumbre a la narrativa de evolución gradual de DXC", declararon los analistas de Citi, manteniendo su calificación Neutral y fijando un precio objetivo de 24 dólares.
Los analistas de Wolfe Research tienen una opinión algo diferente, sugiriendo que aunque el cambio de liderazgo introduce un elemento de incertidumbre, podría verse como un desarrollo positivo a largo plazo a medida que DXC se reposiciona para un crecimiento sostenido. Observaron que el planteamiento de Salvino, que incluía iniciativas para reducir los descensos en el segmento de Servicios de Infraestructura Global y posibles ventas de activos como Modern Workplace, no se ha materializado plenamente. También mencionaron que la valoración de la empresa de algunas de sus operaciones en declive podría ser más optimista de lo que cree el mercado.
"Además, hubo dudas sobre la fiabilidad de las proyecciones financieras durante el período de Salvino como CEO. Desde que se convirtió en CEO en septiembre de 2019, la compañía ha reducido sus proyecciones financieras y no ha cumplido con las estimaciones de consenso en varias ocasiones, aunque reconocemos que los crecientes desafíos económicos han hecho que sea más difícil predecir el rendimiento futuro", afirmaron los analistas de Wolfe, manteniendo su calificación de Underperform y un precio objetivo de 22 dólares.
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