Por Kate Abnett
BRUSELAS, 24 abr (Reuters) - El sector europeo de las energías renovables en alta mar no es lo suficientemente grande como para cumplir los objetivos de los Estados de implementar rápidamente la energía verde, y requiere incrementar el apoyo político y de financiación para ponerse en marcha, según afirmaron el lunes empresas europeas del sector.
Este llamamiento conjunto de las empresas se produce mientras los dirigentes de nueve países, entre ellos Alemania, Francia y el Reino Unido, se reunirán el lunes en Ostende (Bélgica) para comprometerse a cuadruplicar con creces la capacidad de energía eólica marina en el mar del Norte para 2030.
"Nuestra industria no es hoy lo suficientemente grande como para cumplir los compromisos de los nueve Estados y satisfacer la creciente demanda de electricidad renovable e hidrógeno renovable", afirmaron más de 100 empresas y grupos industriales en un comunicado conjunto, en el que añadieron que "harían todo lo posible" para garantizar que los nuevos parques eólicos se fabriquen en Europa.
En la actualidad, las industrias europeas pueden fabricar siete gigavatios de energía eólica marina al año, dijeron los firmantes, entre los que se encontraban las empresas energéticas Orsted, Shell (LON:RDSb) y Equinor, el fabricante de aerogeneradores Siemens Gamesa (BME:SGREN), la británica National Grid (LON:NG), el fabricante de equipos de hidrógeno renovable Nel y el grupo industrial Wind Europe.
Según ellos, para alcanzar los objetivos de los países será necesario añadir más de 20 GW al año en unos pocos años.
Las decisiones finales de inversión en parques eólicos marinos europeos se desplomaron en 2022, ya que las promotoras se enfrentaron a una inflación récord, tipos de interés al alza, al aumento de las tasas de arrendamiento de los fondos marinos y la volatilidad de los mercados energéticos.
La inversión se ha recuperado en lo que va de año, pero las empresas afirman que se necesitará más apoyo, o el sector europeo de las energías renovables podría tener dificultades para alcanzar los objetivos de construcción, con el riesgo de que aumente la dependencia de piezas importadas.
Las empresas pidieron mayor financiación pública y de la UE para ampliar la fabricación europea de componentes de energías renovables, y precios indexados a la inflación en las subastas públicas de apoyo a los parques eólicos.
Los firmantes advirtieron a la UE contra la prórroga del límite máximo de ingresos de los generadores de electricidad, que expira en junio. Este sistema se introdujo el año pasado para recuperar el dinero generado por la subida de los precios de la electricidad y devolvérselo a los consumidores, pero la industria se opuso a él por considerar que disuadía a los inversores.
(Reporte de Kate Abnett; edición de Diane Craft; editado en español por Flora Gómez)