Madrid, 20 feb (.).- El consejero delegado de Enagás (BME:ENAG), Arturo Gonzalo, ha indicado que el ajuste en la política de dividendo "asegura los dividendos sostenibles en el futuro" en una compañía que verá progresivamente reducir su base de activos regulados de gas y que tendrá que invertir para que 2030 tenga una gran base de los de hidrógeno.
Gonzalo, en una rueda de prensa en la que ha presentado este martes los resultados de la compañía en 2023, explicaba así esa reducción del dividendo de los 1,74 euros por acción previsto para los años 2024, 2025 y 2026 a 1 euro, lo que supone una rebaja del 42,5 %.
Ha indicado que ésto les va a permitir prepararse para una etapa de "inversión intensa" para "asegurar el futuro de la compañía" y ha explicado que, si las cosas ocurren como han previsto, la base de activos regulados de gas pasará de 3.000 millones de euros en 2024 a 2.000 millones en 2030, fecha en la que esperan haber creado ya una base de activos regulados de 3.000 millones de euros.
Gonzalo ha dicho que, aunque los flujos regulados procedentes del sistema gasista seguirán siendo importantes, de unos 300 millones de euros, los activos de hidrógeno en 2030 serán más que los de gas.
La compañía estima que en el periodo 2024-2026 un 'pay-out' o parte destinada al pago de dividendo de un 40 % sobre los fondos procedentes de operaciones y del 90 % del beneficio neto no ajustado, con lo cual la remuneración al accionista sumaría unos 900 millones de euros.
Según el consejero delegado de Enagás, el ajuste en la política de dividendo proporciona una rentabilidad del 7 % al accionista y ha afirmado que "este ajuste del dividendo de hoy asegura los dividendos sostenibles del futuro".
Ha explicado que los 3.200 millones más de inversión que ahora contempla Enagás con respecto al Plan Estratégico que presentó en julio de 2022 se deben a que entonces no incorporaron proyectos de hidrógeno que entonces "no tenían visibilidad" y ahora sí.
Gonzalo Aizpiri ha dicho que esperan que el sistema de hidrógeno que se cree en España tenga la retribución propia de un sistema regulado y que se retribuyan los trabajos en curso con una financiación "razonable" de los activos durante su construcción.
Tasa de retribución del 7 % o el 8 % para el hidrógeno
En opinión de Enagás, la tasa de retribución financiera tendría que estar entre el 7 % y el 8 %, en línea con otros países europeos, para acometer la infraestructura, y considera que, además, tendría que tener periodos de observación "más cercanos en el tiempo" dada la etapa de volatilidad y altos tipos de interés.
En cuanto a la financiación de las infraestructuras de hidrógeno, ha dicho que en el caso de BarMar, el hidroducto entre la Península Ibérica y Francia tendrá financiación comunitaria y en la parte en que ésta no llegue de los consumidores.
Por lo que se refiere a la red troncal española, la financiación se repercutirá en los consumidores españoles y en el caso de las interconexiones en los beneficiarios en los países de destino.
Gonzalo Aizpiri ha señalado también que una parte del superávit que tiene el sistema gasista tiene que empezar a financiar la infraestructura de hidrógeno.
En cuanto a posibles desinversiones de la compañía, ha dicho que para Enagás "los activos en América no son estratégicos a largo plazo" pero no considerarán una desinversión si el mercado no está maduro para ello y no permite capturar valor.
Ha explicado que la compañía, en su día, al prever que los ingresos regulados que tiene en España iban a ir cayendo, fue buscar oportunidades de crecimiento internacionales donde las encontró, pero los años han ido pasando y Enagás ha reenfocado su estrategia.
Las apuestas internacionales se harán en Europa
En este sentido, ha dicho que habrá apuestas internacionales en Europa, que ha dicho que va a tener un sistema energético cada vez más integrado.
"Vamos a seguir apostando por activos internacionales con una visión española y europea", ha dicho Aizpiri, quien, por otro lado, ha explicado que Enagás contempla tener un laudo favorable por el 100 % de la cantidad que reclaman en el arbitraje contra el Gobierno peruano por el Gasoducto Sur Peruano (GSP).
Enagás contempla que percibirá en el periodo 2027-2030 236 millones de euros, correspondientes al 50 % de la cantidad que reclama, y a partir de 2030 el resto.