Arantxa Iñiguez
Fráncfort (Alemania), 8 may (EFE).- La compañía alemana de suministro energético E.on redujo en el primer trimestre del año el beneficio neto subyacente un 16 %, hasta los 1.394 millones de euros, debido a la caída de los márgenes en la generación fósil y a las desinversiones.
E.on informó hoy de que la facturación se mantuvo en el mismo periodo en 35.881 millones de euros (35.731 millones de euros un año antes).
Las ventas de gas subieron en los tres primeros meses del año un 5 %, mientras que las de electricidad bajaron un 8 %.
La ganancia operativa se redujo entre enero y marzo un 3 %, hasta 2.735 millones de euros.
La compañía alemana explicó que las desinversiones y los márgenes de beneficio más bajos en la generación de energía fósil redujeron la ganancia.
El beneficio neto atribuible a los accionistas subió en el primer trimestre un 26 %, hasta 2.150 millones de euros.
El beneficio neto subyacente ha sido ajustado para excluir algunos efectos extraordinarios.
El presidente de E.on, Johannes Teyssen, dijo en el informe trimestral que los resultados respondieron a las expectativas y explicó que la compañía lleva a cabo su proceso de transformación, lo que incluye la unidad de renovables.
La producción de electricidad convencional en Europa sufre una fuerte presión sobre los márgenes de rentabilidad y las centrales de gas apenas son rentables ante la oferta de energía renovable.
El gas representa un 34 % en la generación de electricidad de E.on, que ya ha cerrado algunas centrales energéticas de gas en Europa y actualmente estudia el cierre de otras.
"La situación económica de nuestras actividades en Europa, en concreto la generación de electricidad convencional, sigue siendo difícil", según Teyssen.
El presidente de E.on criticó el fracaso de la UE en el intento de revitalizar el programa de negociación de emisiones ya que no mejora las perspectivas de las plantas de electricidad alimentadas por gas y avanzadas tecnológicamente de la compañía.
Estas plantas están siendo relegadas del mercado por las renovables y el lignito.
Las ventas por la generación de electricidad cayeron en el primer trimestre un 18 %, hasta 3.085 millones de euros, por el retroceso de la energía de recursos fósiles (-28 %) tras el cierre de varias centrales en el Reino Unido y la reducción de activos de gas y carbón en Alemania, España y Holanda.
Las ventas de energía nuclear subieron un 5 %, a 1.247 millones de euros, por el incremento en Suecia.
Asimismo, las ventas de renovables subieron un 4 %, hasta 665 millones de euros.
E.on pide un nuevo diseño del mercado de electricidad, que tenga reglas justas para mantener la capacidad de generación e incentivos a largo plazo para la construcción de nuevos activos.
La reducción de costes y el aumento de la ganancia en renovables por el aumento de la capacidad instalada de generación tuvieron un efecto positivo en el resultado del primer trimestre de 2013.
E.on tenía a finales de marzo una deuda neta de 31.600 millones de euros, 4.300 millones de euros menos que a finales de 2012 por el proceso de desinversiones y el flujo de caja operativo positivo.
Asimismo, la empresa alemana redujo en el primer trimestre las inversiones un 21 %, hasta 900 millones de euros, en comparación con el primer trimestre de 2012.
E.on reiteró sus pronósticos de beneficio neto subyacente para el conjunto del ejercicio actual de entre 2.200 y 2.600 millones de euros (4.035 millones de euros en 2012).
Las acciones de E.on subían en la Bolsa de Fráncfort un 0,2 %, hasta 13,22 euros a media jornada. EFE
Fráncfort (Alemania), 8 may (EFE).- La compañía alemana de suministro energético E.on redujo en el primer trimestre del año el beneficio neto subyacente un 16 %, hasta los 1.394 millones de euros, debido a la caída de los márgenes en la generación fósil y a las desinversiones.
E.on informó hoy de que la facturación se mantuvo en el mismo periodo en 35.881 millones de euros (35.731 millones de euros un año antes).
Las ventas de gas subieron en los tres primeros meses del año un 5 %, mientras que las de electricidad bajaron un 8 %.
La ganancia operativa se redujo entre enero y marzo un 3 %, hasta 2.735 millones de euros.
La compañía alemana explicó que las desinversiones y los márgenes de beneficio más bajos en la generación de energía fósil redujeron la ganancia.
El beneficio neto atribuible a los accionistas subió en el primer trimestre un 26 %, hasta 2.150 millones de euros.
El beneficio neto subyacente ha sido ajustado para excluir algunos efectos extraordinarios.
El presidente de E.on, Johannes Teyssen, dijo en el informe trimestral que los resultados respondieron a las expectativas y explicó que la compañía lleva a cabo su proceso de transformación, lo que incluye la unidad de renovables.
La producción de electricidad convencional en Europa sufre una fuerte presión sobre los márgenes de rentabilidad y las centrales de gas apenas son rentables ante la oferta de energía renovable.
El gas representa un 34 % en la generación de electricidad de E.on, que ya ha cerrado algunas centrales energéticas de gas en Europa y actualmente estudia el cierre de otras.
"La situación económica de nuestras actividades en Europa, en concreto la generación de electricidad convencional, sigue siendo difícil", según Teyssen.
El presidente de E.on criticó el fracaso de la UE en el intento de revitalizar el programa de negociación de emisiones ya que no mejora las perspectivas de las plantas de electricidad alimentadas por gas y avanzadas tecnológicamente de la compañía.
Estas plantas están siendo relegadas del mercado por las renovables y el lignito.
Las ventas por la generación de electricidad cayeron en el primer trimestre un 18 %, hasta 3.085 millones de euros, por el retroceso de la energía de recursos fósiles (-28 %) tras el cierre de varias centrales en el Reino Unido y la reducción de activos de gas y carbón en Alemania, España y Holanda.
Las ventas de energía nuclear subieron un 5 %, a 1.247 millones de euros, por el incremento en Suecia.
Asimismo, las ventas de renovables subieron un 4 %, hasta 665 millones de euros.
E.on pide un nuevo diseño del mercado de electricidad, que tenga reglas justas para mantener la capacidad de generación e incentivos a largo plazo para la construcción de nuevos activos.
La reducción de costes y el aumento de la ganancia en renovables por el aumento de la capacidad instalada de generación tuvieron un efecto positivo en el resultado del primer trimestre de 2013.
E.on tenía a finales de marzo una deuda neta de 31.600 millones de euros, 4.300 millones de euros menos que a finales de 2012 por el proceso de desinversiones y el flujo de caja operativo positivo.
Asimismo, la empresa alemana redujo en el primer trimestre las inversiones un 21 %, hasta 900 millones de euros, en comparación con el primer trimestre de 2012.
E.on reiteró sus pronósticos de beneficio neto subyacente para el conjunto del ejercicio actual de entre 2.200 y 2.600 millones de euros (4.035 millones de euros en 2012).
Las acciones de E.on subían en la Bolsa de Fráncfort un 0,2 %, hasta 13,22 euros a media jornada. EFE