Madrid, 14 may (EFE).- La empresa de juego española Codere (MADRID:CDRE) perdió 35,7 millones de euros en el primer trimestre de 2015, lo que supone aumentar en un 29,8 % los números rojos contabilizados un año antes debido a los costes de la reestructuración de deuda y a los impuestos al juego en Italia.
La cifra de facturación de la compañía alcanzó los 396,8 millones de euros, un 20,4 % más que un año antes impulsada, fundamentalmente, por el incremento de ingresos en Argentina y México gracias a la apreciación de sus divisas frente al euro, a la mayor media por máquina y al mayor número de las mismas.
Por su parte, el resultado bruto de explotación (ebitda) se situó en 66,3 millones, un 38,7 % más, según las cuentas remitidas a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el regulador bursátil.
Los gastos financieros aumentaron un 8,8 % hasta los 32,2 millones, debido a los mayores costes asociados a la línea sénior de crédito, que incluyen los intereses de demora; a los intereses generados por los cupones no pagados y a nuevas financiaciones o refinanciaciones en Uruguay y México.
Por países, la mayor parte de los ingresos se contabilizaron en Argentina, donde se incrementaron un 36,7 % más hasta los 158,1 millones por el aumento en la media diaria por máquina en moneda local (23,3 %) junto con el mayor número de puestos y favorecido por la apreciación del peso argentino frente al euro.
A continuación se situó México con 90,9 millones, el 15,9 % más; Italia, con 69,2, el 6,8 % más.
España, por su parte, la facturación alcanzó los 37,6 millones, el 0,3 % más que un año antes, ya que los ingresos de las apuestas deportivas permitieron compensar la disminución de ingresos de máquinas y en menor medida del negocio de bingo.
A cierre del periodo, las inversiones alcanzaron los 10,5 millones, de los cuales 8,2 millones se corresponden a mantenimiento y 2,3 millones al crecimiento.
A 31 de marzo de 2015 la caja ascendía a 106,1 millones.
En relación al proceso de reestructuración financiera, Codere y sus acreedores continúan con los trabajos de implementación del acuerdo "Lock up Agreement" por el que se comprometen a no vender.