Vigo, 2 jul (.).- Valença do Minho (Portugal) ha sido el escenario donde el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el de la Comisión de Coordinación y Desarrollo Regional del Norte (CCDR-N) luso, Antonio Cunha, han firmado hoy un manifiesto para pedir de sus gobiernos nacionales un plan de inversiones que garantice que la alta velocidad entre Vigo y Oporto sea una realidad en 2032.
"Entendemos que es necesario seguir haciendo presión, en el buen sentido, pero presión; seguir poniendo de manifiesto que esto es un asunto absolutamente capital", ha dicho Rueda, según el cual urge "una planificación, presupuestos y plazos concretos" para que la alta velocidad acabe siendo una realidad dentro de ocho años.
"Reclamamos lo que nos corresponde, lo que merecemos y lo que llevamos tiempo esperando", ha añadido el titular del Ejecutivo autonómico, quien ha recordado que esta cuestión fue central en diferentes cumbres entre los gobiernos de ambas naciones.
Rueda ha demandado mejoras en el actual tren entre Vigo y Oporto, el Celta: "No es de recibo que hasta 2032 tengamos un tren Celta en estas condiciones, con esta velocidad tan baja para lo que son las comunicaciones ferroviarias, con convoyes muy mejorables, con combinaciones y frecuencias que no son las mejores, creo que esto se puede solucionar con un esfuerzo menor".
Para Rueda "no sería un argumento aceptable decir que como vamos a tener la gran infraestructura dentro de ocho años no vale la pena invertir en estos años en el tren Celta", ya que en su opinión, haciendo "un pequeño esfuerzo económico" ahora, se conseguiría una rentabilidad muy alta y un importante incremento de los usuarios.
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