Madrid, 17 mar (.).- El Ministerio de Industria ha afirmado hoy que hay ser "responsables y muy precisos" en la asignación y la justificación de las ayudas previstas en los fondos europeos para la recuperación de la pandemia porque, al ser España uno de las primeros en activarlas, le "van a estar mirando" las instituciones comunitarias y el resto de países.
Así lo ha asegurado el director general de Industria y de la Pyme del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, Galo Gutiérrez, en la clausura digital de un encuentro organizado por la Asociación española de proveedores de automoción (Sernauto) y en el que se ha debatido sobre el estudio de Roland Berger: "La crisis covid-19 ¿una ventana de oportunidad para los proveedores de automoción?"
Gutiérrez ha recordado que, de los 750.000 millones de euros previsto por Europa, unos 70.000 corresponden a España que, junto a Italia, van a ser de los primeros en solicitarlas (el plazo acaba a finales de abril), por delante de países como Alemania y Francia.
Para identificar las áreas de trabajo el Gobierno abrió un Manifiesto de Interés a las empresas industriales, para que éstas le presentarán sus proyectos en dos sectores claves, como son la transformación digital y la lucha contra el cambio climático.
Según ha dicho, han recibido (el 20 de enero acabó el plazo) 724 llamadas de interés, de las que 15 corresponden a las empresas de componentes de automoción.
Al respecto, ha precisado que el hecho de participar no genera derechos a un potencial acceso a la financiación, ni genera obligaciones por parte del Ministerio.
Actualmente las están analizando y han empezado por uno de los sectores industriales más significativos, el de la automoción para que su correspondiente Perte (Proyectos estratégicos para la recuperación y transformación económica) pueda ser aprobado por el Consejo de Ministros y ver las fórmulas de convocatoria para acceder a los fondos.
El director general de Sernauto, José Portilla, ha destacado que el sector al que representan es uno de los más castigados por la pandemia, ya que en 2020 su facturación ha bajado un 15 % y ha perdido el 5 % del empleo, lo que supone "una caída sin precedentes", a pesar de la internacionalización de las empresas.
Por ello, ha pedido que, entre todos, se cuide a este sector tan estratégico para el país, que tanto invierte en I+D+i y que crea empleo de calidad, y ha celebrado que el primer Perte sea para la automoción.
Según el estudio de Roland Berger, los volúmenes de ventas de facturación previos a la pandemia de los proveedores de automoción no se recuperarán hasta 2025-2026, un momento en el que tanto el mercado y los clientes serán distintos, por lo que emplazan a prepararse desde hoy "en una situación extremadamente difícil".
El consejero delegado de Volvo (ST:VOLVb) España, José María Galofré, se ha mostrado más optimista y ha fijado la recuperación en 2023 para España (con 1,2 millones de vehículos matriculados, pero aumentando el alquiler a largo plazo, disminuyendo la propiedad y con más unidades electrificadas); mientras que el de Continental (DE:CONG) Automotive Spain, Eduardo González, ha estimado que no será antes del 2025 para los proveedores.
En el debate también ha participado el consejero delegado de Ficosa Internacional, Javier Pujol, quien ha destacado la importancia de competir en campos como el del software, la electrónica, el infoentretenimiento en los coches y las nuevas formas de movilidad para sobrevivir a los efectos de la pandemia en la industria.