Por Foo Yun Chee
BRUSELAS (Reuters) - Las autoridades de competencia de la UE impusieron a Google el martes una multa histórica de 2.420 millones de euros, una decisión que sugiere que posiblemente serán duros en otros dos casos con la filial de Alphabet (NASDAQ:GOOGL).
La Comisión Europea dijo que el motor de búsqueda en internet más popular del mundo tiene 90 días para poner fin a sus prácticas anticompetitivas o en su defecto afrontar penalizaciones de hasta un 5 por ciento del volumen medio diario de los ingresos de Alphabet a escala mundial.
La Comisión concluyó que Google ha concedido de forma sistemática un lugar prominente en las búsquedas a su propio servicio de comparativas de productos (Google Shopping) en detrimento de sus rivales.
"Lo que Google ha hecho es ilegal según las normas de competencia de la UE y ha negado a otras empresas la oportunidad de competir por los méritos e innovar. Y lo que es más importante, ha negado a los consumidores europeos una oferta genuina de servicios y los beneficios completos de la innovación", dijo la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, en un comunicado.
Esta medida se produce tras una investigación de siete años a instancias de decenas de quejas de rivales como el sitio web estadounidense de opiniones de consumidores Yelp (NYSE:YELP), TripAdvisor, la web de comparativas británicas Foundem, News Corp (NASDAQ:NWS) y el grupo de presión FairSearch. Se trata de la multa más elevada para una sola compañía por infringir las normas de competencia desde la sanción de 1.060 millones de euros que la Comisión impuso al fabricante estadounidense de semiconductores Intel (NASDAQ:INTC) en 2009.
También supone el mayor revés regulatorio para Google hasta la fecha, después de llegar a un acuerdo en 2013 con las autoridades estadounidenses para dejar de "recortar" opiniones y otros datos de páginas de internet rivales para sus propios productos.
El regulador de competencia comunitario también acusa a Google de usar su sistema operativo para móviles Android para machacar a sus rivales, un caso que podría ser el más perjudicial para la empresa estadounidense.
También ha sido acusada de bloquear a los rivales en la búsqueda de publicidad online y la Comisión ha advertido sobre la posibilidad de multas disuasorias si Google es encontrado culpable.