Dublín, 30 nov (.).- La subsidiaria de Facebook (NASDAQ:FB) en Irlanda obtuvo un beneficio bruto de 890 millones de euros en 2020, frente a los 482 millones de ganancias del año anterior, según los resultados publicados este martes por la Oficina de Registro de Empresas de Dublín.
El informe también indicó que Facebook Ireland ha elevado hasta los 1.020 millones de euros, desde los 302,3 millones de 2019, el fondo de contingencia creado para pagar las multas de las autoridades reguladoras.
La Comisión de Protección de Datos de Irlanda (DPC), principal regulador en el ámbito de la privacidad en la Unión Europea (UE), ya impuso este año una multa de 225 millones de euros a WhatsApp Ireland, si bien tiene en marcha varias investigaciones sobre otras compañías del grupo de Facebook, ahora llamado Meta.
Facebook Ireland, que tiene su base de operaciones europeas en Dublín, atribuyó el aumento de los beneficios al crecimiento de los ingresos de la publicidad contratada por "terceras partes", lo que elevó la facturación hasta los 40.600 millones en 2020, el 18 % más que en 2019.
Con estos resultados, la subsidiaria irlandesa destacó que aportó un dividendo de 20 millones de euros a la compañía matriz Facebook International Operations.
Asimismo, el informe remitido por Facebook Ireland confirmó que la empresa pagó un extra adicional de 35 millones de euros para hacer frente a "asuntos fiscales pendientes", con lo que su factura final se situó en los 266,3 millones de euros el pasado año.
"La compañía espera que las cuestiones regulatorias se resuelvan en cualquier momento dentro de los próximos dos años financieros. Sin embargo, ese momento puede verse afectado por una serie de incertidumbres, incluido el tiempo que se tardará en completar cualquier decisión regulatoria, así como cualquier recurso o disputa", señaló Facebook Ireland, en referencia a las pesquisas de la DPC.
La red social, que emplea a más de 2.000 personas en Irlanda, agregó que su "factura de remuneración", que incluye salarios, costes de pensiones o retribuciones al accionariado, entre otros, alcanzó los 377 millones de euros.