Madrid, 29 jun (.).- El número de viviendas heredadas en 2022 en España sigue por encima de los niveles prepandemia y suponen ya el 14,6 % de la oferta total de vivienda en el mercado para compra o alquiler, frente al 13,7 % que representaban en 2019, según un estudio publicado este miércoles por el portal inmobiliario Fotocasa.
Los herederos que deciden vender la vivienda alcanzan el 20,7 % del total de vendedores de vivienda en 2022 -un incremento del 3,1 % respecto a 2019-, mientras que los que deciden alquilarla suponen el 9 % del total de arrendadores -una cifra casi idéntica a la de 2019-.
La directora de estudios y portavoz de Fotocasa, María Matos, ha señalado en un comunicado que las cifras de herencias "van volviendo a la normalidad" después de haber alcanzado una "cifra récord" en 2021, cuando se transmitieron casi 200.000 viviendas por herencia, tras el exceso de mortalidad provocado por el coronavirus.
El estudio, realizado por Fotocasa Research, revela que los herederos se decantan por el mercado de venta frente al del alquiler por motivos personales (el 36,2 % del total) o para evitar problemas con el pago de la renta (19,6 %) o con inquilinos que estropeen la propiedad (17,7 %).
Por su parte, los herederos que deciden alquilar lo hacen porque prefieren tener una fuente de ingresos regular (50,1 %) y que la propiedad esté habitada (49,7 %), así como por la rentabilidad que ofrece el alquiler (38,4 %).
Los herederos de vivienda tienen una visión del mercado inmobiliario similar a la de la población en general y consideran en casi un 80 % que el sentimiento de propiedad sigue muy arraigado en España, un dato que va en sintonía con el 65 % que piensa que compensa más pagar una hipoteca que por un alquiler.
Esta idea ha ido cogiendo fuerza en los últimos años en vista de que hay un 46,7 % que opina que vivir de alquiler es "tirar el dinero" frente al 39,5 % que pensaba así en 2019.
De igual manera, la tendencia de los últimos años muestra una mayoría creciente de herederos (48,6 %) que consideran que la vivienda es muy cara y que los precios, tanto de compra como de alquiler, seguirán subiendo por el aumento de la demanda y la escasez de oferta de vivienda en el mercado.