Por Carl O'Donnell y Pamela Barbaglia
NUEVA YORK/LONDRES (Reuters) - Si 2015 fue un año soñado para los principales negociadores, el 2016 está empezando a tomar un rumbo de pesadilla.
Algunas de los negocios que hicieron descorchar champán ensalas de reuniones están chocando ahora con mayores controlesantimonopolio.
En el caso de la fusión entre la farmacéutica Pfizer Inc (NYSE:PFE) y su rival Allergan PLC por 160.000 millones dedólares, el negocio enfrentó oposición política porque implicabaque la mayor farmacéutica de Estados Unidos se trasladara aIrlanda para reducir sus impuestos.
El Tesoro de Estados Unidos reveló nuevas reglas esta semanaque, si bien no identificaron a Pfizer y Allergan, incluyeroncláusulas que apuntaban a un aspecto específico de su plan defusión y llevaron a que ambas partes desecharan el que hubieresido el segundo mayor acuerdo de todos los tiempos.
La medida del Gobierno de Barack Obama ha enviado un mensajeescalofriante a los negociadores y se suma a desafíos legalesque enfrentan grandes fusiones y adquisiciones, como la comprapor parte de Halliburton (NYSE:HAL) Co de la compañía de serviciospetroleros Baker Hughes Inc.
La incertidumbre política y las preocupaciones por conductaseventualmente monopólicas han hecho que las empresas piensen dosveces antes de negociar futuras fusiones o adquisiciones queconsoliden actores en un sector y trasladen obligaciones tributarias al extranjero.
"A medida que la incertidumbre crece en múltiples frentes,las compañías están claramente más cautas y el número denegocios valorados en 10.000 millones de dólares o más ha caídosignificativamente este trimestre comparado con el año pasado",dijo Luigi Rizzo, director de fusiones y adquisiciones de Bankof America Merrill Lynch.
Las nuevas reglas estadounidenses no afectan directamente ala mayor parte de los negocios de reversión, en los quecompañías estadounidenses compran firmas extranjeras y luego setrasladan al exterior para reducir sus impuestos, pero hanenviado un mensaje a los directivos sobre los riesgos detrasladar su domicilio tributario.