Tokio, 29 sep (.).- Mitsubishi Heavy Industries (TYO:7011) (MHI) anunció este jueves que desarrollará un reactor nuclear más seguro junto a otras cuatro empresas locales de energía, en línea con el plan del Ejecutivo nipón de construir una nueva generación de plantas nucleares.
El modelo de este innovador reactor de agua ligera se basa en unidades ya existentes y podría ser lanzado a mediados de los años 2030, confirmó hoy la compañía en un comunicado, donde apuntó que el mismo "incorpora lecciones aprendidas del accidente de Fukushima Daiichi" de 2011.
A Mitsubishi (TYO:8058) Heavy, se sumarán las empresas locales de energía Kansai Electric, Hokkaido Electric Power, Shikoku Electric Power y Kyushu Electric Power (TYO:9508), con el fin de crear un reactor "resistente a las catástrofes naturales, terrorismo y cualquier otro imprevisto".
Las empresas quieren reducir la probabilidad de que este reactor pueda sufrir daños a menos del 1 %, instalándolo bajo tierra y fortificando las paredes exteriores de la vasija de contención y además se colocará un "captador de núcleo" bajo la misma para evitar que el combustible nuclear fundido se escape en caso de fusión.
"Estos esfuerzos garantizarán la disponibilidad de nuevas tecnologías nucleares innovadoras para un suministro energético estable para Japón", señaló MHI en dicho comunicado, en el que apuntó que el reactor trabajara en conjunto con fuentes de energía renovables.
El anuncio se produce después de que el Ejecutivo japonés señalara que planea la construcción de una nueva generación de plantas nucleares, así como extender la vida útil de sus reactores por encima de los 60 años, con el objetivo de reducir sus emisiones de CO2.
Estas propuestas, que suponen un cambio importante en la política del Gobierno nipón de no construir nuevas centrales, incluyen también la reactivación de un total de 17 reactores para el verano que viene, después del apagón posterior a la crisis de Fukushima de 2011.
Japón entró en un "apagón nuclear" tras el accidente de la central de Fukushima Daiichi desencadenado por el terremoto y el tsunami de marzo de 2011.
El Gobierno y la nueva autoridad reguladora para la energía atómica establecieron criterios de seguridad más estrictos a raíz de esta crisis que obligaban a todas las plantas del país a suspender sus operaciones hasta atenerse a los nuevos estándares.
Sin embargo, solo unos pocos reactores nucleares han recibido el visto bueno de las autoridades para volver a funcionar, del total de 42 existentes en condiciones técnicas de operar pero que no han superado los nuevos estándares de seguridad del regulador nipón o han sido desaprobados por la justicia.