Fráncfort (Alemania), 30 abr (.).- El fabricante de motores para aviones MTU Aero Engines (DE:MTXGn) ha bajado en el primer trimestre el beneficio neto hasta 111,8 millones de euros, un 11,6 % menos que un año antes.
MTU Aero Engines informó este jueves de que el resultado operativo se redujo en el mismo periodo hasta 181,8 millones de euros (-3 %), mientras que la facturación subió hasta 1.272,7 millones de euros (+12,5 %).
El primer trimestre estuvo afectado por la crisis del coronavirus, "aunque la caída en la demanda como resultado de la pandemia de coronavirus no se refleja todavía en las cifras trimestrales y la utilización de capacidades sigue siendo elevada", dijo el consejero delegado de MTU Aero Engines, Reiner Winkler.
El sector comenzó a sentir los efectos en febrero y la crisis se volvió significativamente más marcada en marzo, como resultado MTU ha decidido suspender el reparto de dividendos, pospuesto la junta general de accionistas, suspendido las operaciones en sus fábricas en Alemania y Polonia durante tres semanas y retirado sus pronósticos para este año.
El flujo de caja libre bajó en los tres primeros meses del ejercicio hasta 68,7 millones de euros (-51,4 %).
MTU prevé que la crisis por el coronavirus, que ha paralizado el transporte aéreo, tendrá un impacto negativo en las demanda de motores y en los ingresos del segundo trimestre.
El negocio militar, al que vende motores para el avión de combate Eurofighter y para el de transporte Airbus (PA:AIR) A400M, apenas se verá afectado.
Pero en el comercial, al que suministra motores para los Airbus A220 y A320neo, el Boeing (NYSE:BA) 787 "Dreamliner" de largo recurrido y el Boeing 777X, se va a producir una significativa caída de la demanda, según MTU, cuyas acciones han caído en bolsa un 50 % por la crisis del coronavirus, aunque ahora comienzan a recuperarse.
Las compañías de aviones Airbus y Boeing ya han informado de que van a reducir la producción por la crisis.
El sector de mantenimiento de aviones comerciales también se verá afectado por una caída de la demanda, al menos, en el segundo y tercer trimestre, especialmente en el sector de pasajeros, mientras que la demanda de las empresas de mercancía podría salvaguardar la utilización de capacidades.