París, 3 dic (.).- Orange (PA:ORAN) anunció este jueves que prepara una oferta pública de adquisición bursátil sobre las acciones que no controla en su filial belga y que va a repartir un dividendo excepcional, después de haber recibido 2.200 millones de euros del fisco francés para saldar un viejo contencioso.
El operador francés de telecomunicaciones explicó en un comunicado que la opa que contempla se pagaría en efectivo a un precio de 22 euros por cada acción de Orange Belgium y que "si se dan las condiciones", suspenderá la cotización de esa filial en la Bolsa de Bruselas.
La compañía destacó que ese precio representa una prima del 35,6 % respecto a la cotización de Orange Belgium al cierre del miércoles y del 49,3 % si se compara con la media ponderada en los seis últimos meses.
En caso de conseguir el 100 % del capital (ahora dispone del 52,91 %), tendría que desembolsar unos 620 millones de euros.
La oferta, que va a ser examinada por el consejo de la filial belga, tiene como objetivo declarado "reforzar la posición de Orange" para permitir que Orange Belgium "despliegue más eficazmente su estrategia de creación de valor de largo plazo y reaccione más eficazmente a las grandes transformaciones del mercado belga".
Orange indicó, por otra parte, que gracias a los 2.200 millones que acaba de ingresar su consejo propondrá una distribución excepcional de un dividendo de 20 céntimos de euro por cada acción, lo que representaría unos 530 millones de euros.
El pago de ese dividendo, condicionado a su aprobación en la próxima junta de la empresa, se haría a mediados de 2021.
Además, Orange dedicará "cerca de un cuarto" del dinero que ha recibido del fisco francés al aumento de su plan de despliegue de redes en Francia y en los otros países donde tiene su negocio.
Eso incluye, en particular, las infraestructuras de fibra óptica, las redes de 5G o el proyecto de un nuevo barco de instalación de cables submarinos que ha anunciado esta misma semana.
Otro cuarto de la partida de 2.200 millones será para "el acompañamiento de la transformación operativa" de Orange con la intención de ser una empresa más ágil y eficiente. En espera de más definición, se sabe que se reforzará la formación de su personal en nuevas tecnologías y servicios.
El operador francés lanzará una oferta reservada a sus empleados para que puedan adquirir unos 30 millones de acciones con la vista puesta en que puedan llegar a controlar el 10 % del capital.
Igualmente consagrará "una parte de los fondos" no cifrada a sus compromisos para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y para la igualdad digital. El resto irá a la reducción del endeudamiento.
El pasado 13 de noviembre, el Consejo de Estado de Francia dictaminó en favor de Orange y cerró definitivamente un largo contencioso con la administración fiscal que tenía su origen en una reorganización interna de la empresa en 2005, cuando todavía se llamaba France Télécom.