Por David Shepardson y Lisa Barrington
WASHINGTON, 9 ene (Reuters) - La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte de Estados Unidos (NTSB) dijo a última hora del lunes que aún no podía informar si un panel de cabina recuperado que se desprendió de un avión Boeing (NYSE:BA) 737 MAX 9 de Alaska Airlines (NYSE:ALK) en pleno vuelo la semana pasada había sido fijado correctamente.
El regulador habló después de que Alaska Airlines y el otro operador estadounidense del 737 MAX 9, United Airlines, dijeron el lunes que habían encontrado piezas sueltas en varios aviones inmovilizados, lo que suscitó nuevas preocupaciones entre los expertos del sector sobre cómo se fabrica la familia de aviones más vendida de Boeing.
La Administración Federal de Aviación (FAA) inmovilizó 171 aviones MAX 9 el sábado, después de que el viernes un panel llamado tapón de la puerta salió volando durante un vuelo de Alaska Airlines poco después de despegar de un aeropuerto de Portland, Oregón, lo que provocó un aterrizaje de emergencia.
El panel, que cubre una puerta de salida opcional utilizada por las compañías aéreas que tienen configuraciones de asientos más densas, fue recuperado el domingo por un profesor de Portland que lo encontró en su patio trasero.
La NTSB "aún no ha recuperado los cuatro pernos que lo sujetan en su movimiento vertical", dijo el ingeniero de la NTSB Clint Crookshanks a periodistas en una reunión informativa en Portland. "Y aún no hemos determinado si estaban allí".
El tapón de la puerta se sujeta además en su sitio mediante "herrajes de tope" en 12 lugares diferentes del tapón y del marco de la puerta.
"La puerta se desplazó hacia arriba y se soltó de los topes, lo que fracturó los herrajes", explicó Crookshanks.
DIRECTRICES DE INSPECCIÓN
La presidenta de la NTSB, Jennifer Homendy, dijo que su agencia se centraba en el avión accidentado, pero que no dudaría en hacer recomendaciones de seguridad más amplias si fuera necesario a medida que avanzara su investigación.
Boeing, la FAA y las compañías aéreas estadounidenses siguen debatiendo las directrices de inspección precisas para los demás aviones 737 MAX 9 de sus flotas.
Una fuente familiarizada con el asunto dijo que United ha encontrado hasta ahora cerca de 10 aviones con pernos sueltos durante sus controles preliminares, además de los cinco iniciales reportados por primera vez por la publicación de la industria The Air Current, y la cifra podría aumentar.
Boeing dijo que se mantenía en estrecho contacto con los operadores del MAX 9 y que ayudaría a los clientes a abordar cualquier hallazgo durante las inspecciones.
Una preocupación persistente puede aumentar la presión sobre Boeing, que ha sufrido numerosos problemas de producción desde que inmovilizó la familia completa del 737 MAX en marzo de 2019, lo que duró 20 meses después de dos accidentes mortales que mataron a 346 personas.
Alaska Airlines canceló el lunes 141 vuelos, o el 20% de sus salidas programadas, tras dejar en tierra sus 65 MAX 9. Según la compañía, se espera que la interrupción de los viajes se prolongue al menos hasta mediados de semana.
United, que ha dejado en tierra sus 79 MAX 9, canceló 226 vuelos el lunes, o el 8% de sus salidas programadas.
(Reporte de David Shepardson en Washington y Lisa Barrington en Seúl; editado en español por Javier López de Lérida)