Madrid, 27 nov (.).- Telefónica (BME:TEF) ha anunciado a los sindicatos este lunes que presentará un expediente de regulación de empleo (ERE) que afectará a sus tres sociedades en España, Telefónica Móviles, Telefónica Soluciones y Telefónica España, donde trabajan unas 16.000 personas, han informado a EFE fuentes sindicales y de la empresa.
De momento, la compañía no ha detallado el número de empleados que se verán afectados por los ERE, algo que "legalmente no pueden hacer", ya que cualquier dato previo presentado fuera de la mesa de negociación podría dar lugar a la impugnación del ERE, según han informado este lunes a EFE fuentes sindicales.
Los sindicatos estaban pendientes de que en la reunión de la mesa negociadora del convenio colectivo de la compañía les precisaran si el plan de salidas de Telefónica se hacía a través de un ERE o de un PSI (Plan Suspensión Individual) de Empleo, que afectó a los empleados que nacieron hasta 1967.
Si el ERE incluye a los trabajadores nacidos en 1968 estarían afectados unos 2.500 empleados y si lo hace también a los de 1969 la cantidad ascendería a 5.000. Sin embargo, en la reunión no se ha hablado de cifras, según sindicatos y empresa.
Los detalles tendrán que ser desvelados en las respectivas mesas de negociación que se abran en cada uno de los tres comités intercentros de las empresas afectadas, cuyas fechas no se han fijado, han explicado los sindicatos.
La diferencia entre un ERE y un PSI es que en este último caso el empleado sigue vinculado a la empresa, lo cual quiere decir que mantiene el seguro médico y el plan de pensiones, entre otros. Con el ERE quedaría desvinculado.
Ahora es el momento de negociar las condiciones, han dicho las fuentes sindicales que han explicado que es necesario conocer los términos del ERE que plantea la compañía antes de entrar en valoraciones a este plan.
UGT ha dicho en una nota de prensa que la empresa, antes de acometer un nuevo ajuste de plantilla, ha de apostar por la internacionalización de servicios y la formación.
Piden 35 horas semanales
El sindicato ha insistido en que cualquier plan de salidas ha de estar ligado a la firma de un nuevo convenio colectivo -Convenio de Empresas Vinculadas (CEV)- con una duración mínima de 3 años que blinde a la plantilla y sus condiciones laborales y económicas.
UGT ha marcado como líneas rojas que los empleados mantengan el nivel adquisitivo, explican en la nota de prensa. Además, reclaman las 35 horas semanales, entre otras mejoras.
La próxima reunión de la mesa negociadora del convenio tendrá lugar el 30 de noviembre a las 12.00, mientras que aún no hay fecha para la reunión de las tres mesas negociadoras del ERE.