MADRID (Reuters) - Telepizza (MC:TPZ) desveló el miércoles los planes para su próximo aterrizaje en Irán, convirtiéndose en la primera cadena de comida rápida europea en poner los pies en la república islámica, continuando así su proceso de internacionalización mientras en España sus resultados siguen siendo pobres.
Tras varias operaciones en Reino Unido, Malta y Arabia Saudí, la multinacional con sede en Madrid abrirá 200 tiendas en territorio iraní en un plazo de 10 años, la primera de ellas en Teherán en marzo de 2017, en una alianza estratégica con el iraní Momenin Investment Group Ltd (MIG).
El responsable internacional de Telepizza, Giorgio Minardi, destacó en una reunión con periodistas que el grupo saldrá de su zona de confort europea y latinoamericana, adaptando su estrategia al mercado iraní, lo cual implicará cambios en menús, procedimientos y hasta en el modelo de negocio.
Tanto Minardi como el representante de MIG, Hadi Momenin, se mostraron convencidos de las posibilidades de éxito del servicio y los productos de Telepizza entre los consumidores iraníes pese a las diferencias culturales.
Telepizza, presente en 15 países de Europa, Asia, África y Latinoamérica, está apostando firmemente por los mercados internacionales, que suponen cerca de la mitad de sus ventas.
La cadena de comida rápida publicó a principios de noviembre unos resultados del tercer trimestre lastrados por el aumento de la competencia en España, que sigue uno de sus mayores mercados, compensados solo en parte por su dimensión exterior.
Desde que regresó a la bolsa española a finales de abril, Telepizza acumula un descenso de cerca del 44 por ciento, frente al 10 por ciento que baja el índice general de Madrid.