Tokio, 14 feb (.).- El gigante tecnológico nipón Toshiba (T:6502) retrasará un mes la presentación de sus resultados financieros correspondientes a abril-diciembre de 2016, inicialmente prevista para hoy, debido a las dificultades para superar la auditoría de sus cuentas.
"Toshiba ha presentado una petición para posponer la fecha de presentación de resultados. Hemos entregado el informe de resultados al auditor, pero la revisión no ha sido completada", explicó la compañía en un comunicado.
El conglomerado nipón ha solicitado a la autoridad financiera presentar el 14 de marzo sus resultados de los primeros nueve meses del ejercicio fiscal nipón de 2016, para el que se prevé que Toshiba registre pérdidas multimillonarias debido al deterioro de los activos de su rama nuclear estadounidense.
Asimismo, la empresa tecnológica, energética y de infraestructuras abrió una investigación paralela sobre la devaluación de esta unidad, cuyas conclusiones aún no se han dado a conocer.
"Esta presentación (de resultados) debe incluir un informe sobre el caso, que es posible que influya en los resultados del tercer trimestre", un proceso que no está completado, señaló la empresa.
Toshiba ya se vio obligada a retrasar la presentación de sus resultados en varias ocasiones en 2015 tras destapar un grave escándalo de manipulación contable, por el que la empresa sobrestimó entre 2007 y 2014 sus ingresos por ventas en 224.800 millones de yenes (1.680 millones de euros).
El anuncio de posponer la presentación no cayó bien entre los inversores del parqué tokiota, donde el precio de sus acciones cerraron hoy un 8 % a la baja, y llegaron a acumular una caída del 9,45 %.
El pasado diciembre Toshiba anunció que prevé unas pérdidas de "varios miles de millones de dólares" en relación con la compra a finales de 2015 del constructor estadounidense CB&I Stone & Webster por parte de Westinghouse Electric, la unidad de negocio de energía nuclear de Toshiba en Estados Unidos.
La compañía mantiene un contencioso con Chicago Bridge & Iron, de la que adquirió la empresa, a cuenta de sus tasaciones de los activos y negocios de la constructora de plantas atómicas.
Aunque la corporación japonesa dijo que la valoración final del monto dependerá de la revisión contable que la empresa completará en el primer trimestre de 2017 (abril-junio), los medios locales cifran las pérdidas en más de 700.000 millones de yenes (5.800 millones de euros/6.170 millones de dólares).
Su delicada situación financiera podría llevar a la dimisión del presidente de Toshiba, Shigenori Shiga, según adelantaron a finales de enero los medios nipones, una decisión cuyo anuncio se esperaba también para hoy.
La tecnológica ya anunció que escindirá su negocio de memorias flash para encontrar financiación de terceros y compensar las pérdidas, y que revisará sus operaciones en el sector nuclear, que no incluirán la aceptación de nuevos contratos de construcción.