MADRID (Reuters) - Un juez de la Audiencia Nacional decretó prisión incondicional para dos de los cuatro detenidos con relación a la célula yihadista que atentó la semana pasada en Cataluña dejando 15 muertos y más de cien heridos, según el auto judicial publicado el martes.
Un tercer detenido quedó en libertad condicional -con obligación de presentarse semanalmente ante el juzgado-, mientras que para el cuarto la decisión se ha diferido a la espera de ciertas diligencias.
Los dos enviados a prisión están acusados por el juez Fernando Andreu de los delitos de integración terrorista, asesinatos y lesiones de carácter terrorista, mientras que uno de ellos, Mohamed Houli Chemlal, tiene además los cargos de depósito de explosivos y estragos.
Según una fuente cercana a la investigación, mientras que los otros tres detenidos se declararon inocentes, Houli Chemlal confesó su participación en la célula que llevó a cabo los ataques en Barcelona y Cambrils (Tarragona), reivindicados por el Estado Islámico.
Tras localizar y abatir mortalmente el lunes por la tarde al último integrante de la célula y autor material de los atropellos mortales en las Ramblas barcelonesas, la policía catalana dio por desintegrada la organización yihadista, aunque dijo que seguían investigando posibles conexiones internacionales.
"Aparte de Bélgica o Suiza, también se está investigando Marruecos", dijo el martes el consejero de Interior catalán, Joaquim Forn, en declaraciones a RAC1.
ATENTADOS DE MAYOR ENVERGADURA
Houli Chemlal, español de origen melillense, dijo que pretendían uno o varios atentados de mayores proporciones que los dos ataques que finalmente llevaron a cabo, según la fuente, una vez tuvieran preparados los explosivos que preparaban, sin haber concretado una fecha aún y sin un objetivo claro todavía.
Sin embargo, una explosión involuntaria en una vivienda de Alcanar (Tarragona), en la que la célula acumuló bombonas de butano y explosivos, mató el miércoles 16 de agosto a dos de los miembros del grupo e hirió a Houli Chemlal, que según la fuente dijo estar arrepentido ante el juez.
Esta deflagración habría truncado el plan de los atacantes, según el auto, y "precipitó la sucesión de hechos posteriores", es decir el alquiler de las furgonetas, el atropello múltiple en las Ramblas de Barcelona y el ataque en Cambrils con armas blancas -cuatro cuchillos y un hacha- compradas horas antes de los hechos en un comercio de esta población.
Entre los escombros de Alcanar se encontraron restos del imam Abdelbaki Es Satty, que según Houli Chemlal fue el responsable de la radicalización del grupo durante los últimos meses en el pueblo prepirenaico de Ripoll, sin que vecinos y familiares se dieran cuenta.
El sospechoso herido dijo que el imam, que era "muy estricto y dirigía el grupo", les convenció de que "el martirio es bueno" según el Corán, indicó la fuente judicial.
Según el auto existen indicios de que en la vivienda, donde se encontraron al menos 500 litros de acetona, material utilizado en la confección de explosivos, se estaba intentando fabricar peróxido de acetona (también conocido como TATP), utilizado por el Estado Islámico en otros ataques en territorio europeo.
Según Houli Chemlal, los elementos para la fabricación de los explosivos los habían adquirido en España, en el extranjero o a través de internet, y el objetivo era preparar artefactos cuyo alcance sería luego amplificado al explosionarlos junto a bombonas de butano, dijo la fuente.
Entre los documentos encontrados en la casa de Alcanar se halló, según el auto, un libro verde en cuyo interior había una hoja manuscrita en árabe con el siguiente texto:
"En nombre de Alá, el misericordioso, el compasivo. Breve carta de los Soldados del Estado Islámico en la tierra del Ándalus (nombre que recibía el territorio de la península ibérica bajo poder musulmán durante la Edad Media) para los cruzados, los odiosos, los pecadores, los injustos, los corruptores".
PRISIÓN, LIBERTAD Y CUSTODIA
El otro enviado a prisión es Driss Oukabir, hermano de Moussa Oukabir, muerto a manos de la policía en el segundo ataque, en Cambrils. Oukabir, cuyo pasaporte se encontró en la furgoneta del atropello múltiple que dejó el jueves 13 muertos en Barcelona, insistió ante el juez en que su hermano le había robado el documento, según la fuente.
Salh El Karib -dueño de un locutorio en la localidad de Ripoll, uno de los lugares en los que presuntamente se ideó el golpe- seguirá bajo custodia de la Guardia Civil hasta que el juzgado adopte en las próximas horas una resolución en función de las pesquisas policiales que se están practicando, indicó el auto.
El liberado de manera provisional es Mohamed Aallaa -vecino de la localidad gerundense de Ripoll al igual que los hermanos Oukabir-. Aallaa es titular del Audi (F:NSUG) 3 utilizado por los atacantes de Cambrils, que mataron a una mujer española e hirieron a varias personas más antes de ser mortalmente abatidos por la policía, aunque el juez señala que el usuario real del vehículo sería su hermano Youssef Aalla.
Según el juez, los indicios existentes sobre Aallaa "no son lo suficientemente sólidos como para poder decretar una medida tan excepcional como la de prisión preventiva".
Aallaa argumentó que el verdadero usuario del vehículo a su nombre es su hermano Youssef Aalla, que falleció junto al imam en la deflagración de Alcanar.