MADRID (Reuters) - El fabricante de coches Seat presentó el martes sus mejores resultados de un primer trimestre en los últimos 15 años gracias en parte a la contención de costes, pero en el frente laboral surgió un nubarrón al anunciar los sindicatos varios días de paro de producción por la falta de avances en las negociaciones del convenio colectivo.
En una declaración conjunta del comité de empresa, los representantes de UGT y CC.OO. convocaron seis fines de semana de huelga entre junio y julio en la planta de Seat de Martorell por el desacuerdo entre las partes en la negociación colectiva.
"El último convenio ha sido un convenio de crisis, pero ahora la situación ha cambiado y queremos que esto se refleje en el nuevo convenio", dijo Rafael Guerrero, secretario general de CC.OO. en Seat.
En un principio, los paros afectarían a la producción de los modelos Ibiza y Audi (F:NSUG) Q3 en los turnos del sábado en esta planta y, según los cálculos de los sindicatos, se dejarían de fabricar unos 540/550 coches por cada uno de los seis turnos afectados.
Seat emplea a unos 10.000 trabajadores en su planta de Martorell.
Un portavoz de Seat dijo que la dirección sigue confiando en llegar a un acuerdo con los sindicatos y estaría abierta a ofrecer mejoras para hacer avanzar la negociación.
Seat logró en los primeros tres meses un beneficio operativo de 54 millones de euros, una mejora del 63 por ciento sobre el mismo periodo del año anterior.
No obstante, las ventas de la filial de Volkswagen (DE:VOWG_p) bajaron un 5 por ciento por la interrupción de la producción del Seat Ibiza en enero para instalar una nueva plataforma de ensamblaje.