En general, tanto las acciones de EE.UU. como las acciones europeas superaron la primera semana de septiembre con gran éxito, al menos en lo que respecta al precio de la acción.
Los vientos cruzados ante el anuncio del recorte de tasas de interés por parte del Banco Central Europeo (BCE) así como el informe de las nóminas no agrícolas de EE.UU., peor de lo esperado en agosto, tan sólo causaron algunas turbulencias intradía de los índices de acciones estadounidenses a nivel general.
Al adentrarnos en la segunda semana de septiembre, sigo queriendo operar con un ojo puesto en el precipicio por el bien de la gestión del riesgo, ya que a veces el mercado tarda un par de días en digerir las noticias más importantes antes de establecer el movimiento verdadero (en términos de direccionalidad).
El hecho es, no obstante, que desde una perspectiva más amplia, el repunte desde los mínimos de agosto, que inicialmente parecía un mero rebote de sobreventa, se ha girado hacia un nuevo rally hacia nuevos máximos.
Sí, algunos valores pertenecientes al mercado de la vivienda aún siguen pareciendo débiles (y todavía más débiles lo fueron la semana pasada), pero también vimos fuerza importante en acciones relacionadas con la vivienda, tales como Lowe's Companies (NYSE:LOW), por no hablar de un sólido rendimiento en otros valores clave y los principales indicadores, como las acciones de transporte y de semiconductores.
En lo que respecta al índice de referencia S&P 500, el viernes pasado vimos una caída inicial hacia nuevos mínimos después de que el mercado conociera unos datos sobre nóminas no agrícolas en EE.UU. peores a lo esperado, que tuvieron a los bajistas salivando ante la perspectiva de un cierre semanal negativo.
Los alcistas, sin embargo, robaron una vez más el protagonismo, llevando a los acciones al alza para el resto de la sesión del viernes. Tal vez la lógica aquí se centró en la sospecha de que los débiles datos económicos mantendrán a la Reserva Federal con un tono pesimista y servicial durante más tiempo.
En el gráfico diario del S&P 500, la semana pasada pudimos observar un cierre hacia nuevos máximos históricos, pero el índice se mantiene en los confines del rango de dos semanas en el que ha estado negociando (si incluimos los movimientos intradía).
El precio de la acción, no obstante, se podría consolidar por encima de la zona de 1.990 puntos, es decir, la marca de resistencia anterior, lo que es alcista desde una perspectiva de la tendencia a corto plazo.
En lo que respecta al Dow Jones, el precio de la acción del cierre semanal del pasado viernes fue igualmente alcista. El índice sigue acercándose a niveles justo por debajo de los máximos históricos, una señal alcista hasta que veamos una reversión bajista en el gráfico.
Mi próximo objetivo alcista en el Dow Jones se sitúa alrededor de los 17.350 puntos, por lo que espero que este objetivo se alcance en las próximas semanas, salvo alguna sorpresa bajista desagradable.
El viernes, las acciones de EE.UU. también vieron a un precio de la acción prometedor en algunas de las partes más arriesgadas del mercado, incluyendo al sector de semiconductores, small caps y biotecnológicas.
En cuanto a las acciones de semiconductores, el Philadelphia Semiconductor Index está trabajado en su camino de vuelta hacia máximos de julio vistos el viernes, y con el impulso al alza en marcha, parece estar a punto de romper hacia máximos más altos muy pronto.