Justo después de la enorme sorpresa al alza de este lunes en su informe de resultados del cuarto trimestree de 2017, donde Netflix (NASDAQ:NFLX) ha indicado un alucinante crecimiento de su cuota de suscriptores, la mayoría de los analistas recomiendan una sola cosa en cuanto a las acciones de la compañía: seguir comprando.
Pero con las acciones a 261,30 USD desde el cierre de ayer, lo que supone un alza del 14,8% con respecto al precio al comienzo de esta semana, tal vez algunos titulares de acciones de Netflix se preguntan si no será ahora el momento adecuado para recoger algunos beneficios. Después de todo, ¿qué probabilidades hay de que la empresa siga sorprendiendo de esta manera los próximos trimestres?
Piense lo siguiente: los alcistas tienen muy buenas razones para seguir comprando. Netflix había superado más que con creces las expectativas ya a principios de esta semana después de que la mayor red de entretenimiento online anunciara su mejor año en cuanto al crecimiento de la suscripción hasta el momento, sumándose 24 millones de clientes nuevos en 2017.
Durante los últimos tres meses del año fiscal, Netflix ganó 8,3 millones de suscriptores frente a los pronósticos que hablaban de 6,4 millones. Ese enorme salto situó su audiencia total en 117,6 millones.
Estas grandes subidas impulsaron las ventas del cuarto trimestre hasta un total de 3.390 millones, mientras que las ganancias casi se triplicaron hasta 0,41 USD por acción con respecto al mismo periodo hace un año.
Éste es un historial increíble de crecimiento para la empresa de retransmisión de video, en un momento en el que los gigantes de los medios tradicionales se esfuerzan por mantener su audiencia intacta y llevan a cabo una reorganización masiva.
Para los inversores, Netflix ha demostrado ser una gran inversión. Tras subir un 55% en 2017, las acciones han avanzado un 25% durante las tres primeras semanas de este año. La empresa es la que mejor rendimiento ofrece de entre las del llamado FANG, el acrónimo utilizado para los valores de altísimo rendimiento Facebook (NASDAQ:FB), Amazon (NASDAQ:AMZN), Netflix y Google (NASDAQ:GOOGL).
¿Qué futuro le depara a Netflix?
Una cosa que los inversores deben entender es que no hay que pensar a corto plazo cuando se invierte en una compañía de entretenimiento.
El factor más importante que mantendrá fieles a los suscriptores de Netflix es la calidad y la singularidad de su contenido. Y eso implica un gran chorreo de dinero destinado al desarrollo y mucho tiempo antes de que veamos a Netflix lograr una rentabilidad significativa.
Reed Hastings, cofundador y CEO de la compañía, entiende esto muy bien. Pretende gastarse la friolera de 8.000 millones de USD en la programación de este año y otros 2.000 millones en marketing de contenidos de Netflix. La compañía también tiene la intención de aumentar su programación de habla no inglesa, con producciones en 30 idiomas en 2018.
Esta enorme iniciativa obligará a Netflix a endeudarse considerablemente, lo que comprometerá el crecimiento de los ingresos. Netflix se va a pulir aproximadamente 4.000 millones de USD este año y engordará más la carga de su deuda, que actualmente es de 6.500 millones de USD.
Además, el éxito de Netflix también tiene sus problemas. Otros gigantes de los medios de comunicación muy pudientes se disponen a desafiar el dominio de la compañía en el mercado.
En octubre, Disney (NYSE:DIS) anunció que pretende lanzar un servicio de streaming para competir con Netflix a finales de 2019 con miles de horas de contenido de cine y televisión. Disney tiene la intención de cobrar este extremadamente sólido servicio "substancialmente por debajo" de los precios de las tarifas mensuales de Netflix, según el director ejecutivo de Disney, Bob Iger.
Netflix subió el año pasado 1,00 USD la cuota mensual de su plan más popular hasta 10,99 USD al mes. Netflix también subió 2 USD el coste de su plan premium hasta 13,99 USD. No subió la cuota mensual de 7,99 USD de su plan básico estándar para un solo dispositivo a definición normal.
¿Hay más jugo que exprimir?
Durante los últimos cinco años, los inversores de Netflix se han beneficiado de un recorrido sin precedentes. Las acciones de Netflix han subido más de un 900%, generando más del doble de las ganancias registradas por Facebook y Amazon durante el mismo período.
Sin embargo, yo no creo que el repunte vaya a terminar en un futuro próximo. La fidelidad de los clientes al servicio de Netflix en el mercado de Estados Unidos incluso después de la subida de precio de octubre indica que la empresa puede mejorar significativamente sus resultados subiendo más las tarifas en el futuro.
Y el panorama en el ámbito internacional es aún más alentador. Netflix cree que la mayor parte del futuro crecimiento de las suscripciones vendrá de los mercados extranjeros; todo apunta a que aproximadamente un 77% de los 6,35 millones clientes de la empresa se inscribirán durante el primer trimestre.
Con un múltiplo de precio-utilidad medio de 209 y las acciones subiendo hacia 270 USD, las acciones de Netflix parecen muy caras. Pero si nos centramos sólo en el suculento múltiplo de precio-utilidad, es probable que perdamos perspectiva de la imagen general. Que es la capacidad inherente de Netflix para convertirse en un gigante de los medios de comunicación.
Yo voy a aferrarse a las acciones de Netflix a pesar de la tentación de recoger algún beneficio a estos niveles. Hasta donde yo sé, ¡la fiesta acaba de empezar!