Alibaba comenzó su andadura en 1999 y en la actualidad es un gigante del e-commerce a nivel mundial, en especial en China. Hace unos días, la empresa anunció que se encontraba realizando los trámites ante la Securities and Exchange Commission (SEC) de Estados Unidos para lanzar una oferta pública de acciones (IPO por sus siglas en inglés).
A pesar de que la industria tecnológica vive una desaceleración, bajo este contexto ¿logrará un IPO exitoso?, ¿podrá sortear la suerte de Facebook (NASDAQ:FB)y Twitter Inc (NYSE:TWTR)?
Jack Ma es el fundador y el presidente del holding chino Alibaba Group, formado por varias compañías de comercio electrónico y dedicado principalmente a las compras y pagos online. Entre ellas se destacan: Alibaba, empresa principal del holding, dedicada al e-commerce; Taobao, de servicios consumer to consumer, la mayor tienda online de China y con una importante aplicación móvil; Tmall, de business to consumer, la mayor plataforma comercial que agrupa a marcas y minoristas locales e internacionales.
La compañía también posee Alipay, web similar a Paypal, y Alibaba Cloud Computing, destinada a servicios en nube. Las plataformas comerciales de Alibaba, en el 2013 han generado unas ventas por valor US$ 248 Bn.
La empresa señaló a la SEC que esperaba lograr una capitalización bursátil de 110.000 millones de dólares, aunque según algunos estudios esta cifra podría llegar hasta 150.000 millones. De acuerdo con algunas estimaciones privadas, la compañía podría tener un valor de mercado de entre US$ 135 Bn y US$ 245 Bn, lo que podría ubicarla en la decimoquinta compañía más grande del mundo en cuanto a su capitalización bursátil.
Bajo el argumentando de que las páginas de internet tienen problemas para captar nuevos usuarios, existe un notable escepticismo sobre las acciones tecnológicas, por tal motivo el desafío en Wall Street podría ser hostil. Entonces cabe preguntarnos: ¿Qué rumbo tomara la empresa de Jack Ma? ¿El de Facebook o el de Twitter?
Como muchos recordarán, la salida a la bolsa de Facebook falló por varias razones, entre ellas porque su inauguración fue hecha con grandes anuncios y algunos expertos creen que aquella expectativa, basada en las finanzas que Facebook hizo públicas antes de cotizarse, fue lo que determinó el carácter fluctuante de la acción.
Todo lo contrario ocurrió con Twitter, sin duda alguna marcada por la experiencia de Facebook. La empresa del pajarito hizo una oferta pública de venta confidencial, lo que le permitió a la empresa no tener que publicar su información financiera hasta 21 días antes de que entrara a la bolsa, evitando todo tipo de especulaciones.
Lo más probable es que Jack Ma intente seguir los pasos dados por Twitter. Por lo pronto, ha contratado los servicios legales de Simpson Thacher & Bartlett, reconocida por asesorar a empresas top del ranking mundial de Forbes.