"Las Autoridades Globales dijeron a principio de 2000 que iban a regular los hedge funds y otras armas de destrucción masiva, peor no lo han hecho, sino que han contribuido a su relanzamiento ¿Por qué? Porque en los consejos de administración de estos monstruos están sentados y cobrando fuertes sumas miembros de retirados de la Reserva Federal, premios nobel y banqueros de prestigio, también retirados", me dice E.L., analista bursátil, que está a favor de los cortos, pero en igualdad de condiciones para todos.
"Lo curioso de este fenómeno es que no son rentables, pero sí altamente dañinos. Según los últimos datos oficiosos, manejan 2,25 billones de dólares en activos bajo gestión, de los que el 66% están invertidos en Norteamérica. Imaginen que tres monstruos de estos deciden lanzarse en picado contra la Bolsa española: quedaría reducida a cenizas. Miren lo que pasó con Liberbank (MC:LBK). A rebufo de la crisis del Popular, donde llegaron a tener posiciones cortas del orden del 12%, algunos hedge funds se lanzaron a la yugular de Liberbank hasta hacerla tambalearse".
"Gracias a la rápida actuación de las autoridades, eliminando esta operativa sobre el banco, se evitó la quiebra del mismo y la puesta en duda del sistema bancario español. Es más que una broma pesada de la que hay que tomar buena nota. Los hedge funds son ventajistas".
Desde el 12 de junio, momento en el que los bajistas ostentaban un 1,39% del capital de Liberbank y la CNMV decidió suspender la operativa de cortos sobre esta entidad, las acciones se han recuperado con precios superiores al euro.
Tras la intervención de las autoridades comunitarias en Banco Popular (MC:POP), los títulos de Liberbank se depreciaron un 37,8% en tan solo tres jornadas bursátiles, lo que llevó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) a prohibir durante un mes las operaciones en corto sobre el banco presidido por Manuel Menéndez. Varapalo atroz y puramente especulativo, que puso en duda la viabilidad del banco. El veto a los bajistas y los mensajes de tranquilidad lanzados por las autoridades dispararon las acciones de Liberbank un 41% en la primera jornada de vigencia de la prohibición de las posiciones cortas y así ha seguido.
Actualmente existen en el mundo unos 11.000 hedge funds identificados por Hedge Fund Research. Casi la mitad de ellos (el 46% concretamente) tienen su oficina central en Estados Unidos, país que durante los últimos seis años ha conseguido mantener intacto su dominio como base de operaciones.
Desde 2010, algunos países han ido ganando y perdiendo relevancia en este sentido. Reino Unido, por ejemplo, se encuadra en el primer grupo. En 2016 el número de gestores de hedge funds que habían elegido al país para abrir su oficina representaba el 20% del total, frente al 18% de seis meses antes. También ganan dos puntos Suiza (que pasa del 4% al 6%) y Luxemburgo (del 1% al 3%). El que más representación pierde como centro neurálgico es Brasil, que baja del 4% al 2% en este período.
Desde el inicio de la actual tendencia alcista de las bolsas a principios de 2009 -ahora en cuestión tras las fuertes caídas iniciadas en agosto del año pasado y de las que los índices aún no se han recuperado- una mezcla tradicional de acciones y bonos lo habría hecho mejor que un índice de hedge funds en 22 de los 28 trimestres transcurridos desde entonces, según datos de las empresas de análisis de este mercado HFR y Morningstar.
El resultado es que los inversores reembolsaron 15.000 millones en el primer trimestre de 2016, la mayor salida de fondos trimestrales de los últimos seis años. Estos inversores prefieren poner su dinero en otros activos alternativos, como 'private equity' (capital riesgo, inversión en empresas no cotizadas), el mercado inmobiliario o las autopistas de peaje. Otros están migrando hacia productos que imitan las estrategias de los hedge funds pero con comisiones mucho más baratas.
Así, el fondo soberano de China no está solo en este movimiento. Hace tiempo, las aseguradoras MetLife (NYSE:MET) y AIG también han admitido estar retirando miles de millones de estos vehículos por su pobre rentabilidad. También se están saliendo grandes fondos de pensiones de Nueva York, Illinois u Oklahoma, y firmas como Loews Corp (NYSE:L)., que ha reducido sus inversiones en estos fondos en 500 millones de dólares desde 2014. Incluso los nombres más reputados, como Orch-Ziff Capital, el mayor 'hedge fund' cotizado de EEUU, están sufriendo importantes salidas.