EUR. El euro cerró el viernes una semana complicada, con pérdidas menores frente al dólar y ahora cotiza también a la baja tras un pésimo dato de pedidos de fábrica en Alemania. Estas cayeron en 4,0% en junio, muy por debajo de lo esperado, -0,3%. En particular, los pedidos de fuera de la Unión Europea sufrieron una fuerte caída de -5,9%, lo que podría ser consecuencia de que las distintas cadenas de suministros mundiales empiezan a ser cada vez más locales, para poder mantener su fortaleza ante el posible impacto negativo del incremento de los aranceles sobre el comercio mundial.
GBP. Hizo falta que el gobernador del banco de Inglaterra, Mark Carney, compareciera este viernes en Radio 4 para hablar de las distintas posibilidades del Brexit para que la libra esterlina alcanzase sus niveles mínimos en siete semanas tras la subida de tipos del jueves. Carney dijo que la posibilidad de no alcanzar un acuerdo para el Brexit es dolorosamente elevada, y los acontecimientos del fin de semana no han ayudado a cambiar esta sensación. Lo que se aprecia en las declaraciones del secretario para el comercio internacional del Reino Unido, Liam Fox, al Sunday Times en las que dijo que las posibilidades de abandonar el mercado único sin alcanzar un acuerdo se aproximan al 60%. En una semana en que los tipos de interés subieron hasta el 0,75%, la libra esterlina se depreció en casi un punto porcentual frente al dólar, puesto que la decisión del banco de Inglaterra no se presentó como el inicio de un ciclo de subidas de tipos. La libra esterlina podría rebotar desde sus mínimos si esta semana nos encontramos con algunas sorpresas positivas en los datos macroeconómicos, pero, los inversores tendrán que esperar hasta el viernes, cuando se publicará el producto interior bruto tanto para junio como para el T2. Se espera que el crecimiento durante el segundo trimestre rebote desde el dato de 0,2% del T1 revisado al 0,4%, mientras que se espera que el dato de junio indique una tendencia y alcance también del 0,4%. Además, se espera que el déficit de la balanza comercial del Reino Unido se modere, aunque se prevé que los índices basados en el sector industrial muestren una caída del crecimiento.
USD. Parece que la guerra comercial vuelve a estar en el punto de mira de los mercados, y los tweets enviados por Trump durante el fin de semana no han ayudado a calmar las tensiones. En una cadena de mensajes de autoafirmación, se justifican los aranceles impuestos por EE.UU. y sugieren que Estados Unidos ha “ganado” la guerra comercial frente a China. Estos tweets han sido enviados tras la amenaza de Pekín de imponer nuevos aranceles sobre importaciones estadounidenses por valor de 60.000 millones de dólares como represalia frente a los planes proteccionistas estadounidenses. Aparte de las guerras comerciales, la semana pasada vimos un amplio repunte del dólar, y sólo el dólar canadiense obtuvo avances considerables frente al billete verde. Sin embargo, los datos macroeconómicos estadounidenses de la semana pasada fueron variados, sin tener consecuencias las declaraciones de la Reserva Federal, con los datos de inflación ligeramente por debajo de lo esperado, y con un crecimiento del empleo también por debajo de lo esperado, aunque la tasa de desempleo cayó del 4% al 3,9%. Esta semana tenemos menos datos de interés para el billete verde, aunque la inflación conforme al índice de precios de producción se publicará el jueves y su equivalente para el consumo se publicará el viernes.
CAD. El dólar canadiense mostró su fortaleza el viernes alcanzando su nivel más alto frente al billete verde en siete semanas. El saldo de la balanza comercial canadiense fue mejor de lo esperado, con un déficit que se redujo hasta tan sólo 600 millones de dólares canadienses en junio, muy por debajo de los -2.300 millones de dólares esperados y acercándose al nivel de equilibrio. De pronto, durante el fin de semana, Canadá se ha metido en un problema diplomático al llamar Arabia Saudita a su embajador en Ottawa a consultas, a la vez que pedía a la delegación diplomática de Canadá que abandonase su capital, Riyadh, tras la petición de la ministra de exteriores canadiense, Chrystia Freeland, para la puesta en libertad de las activistas por los derechos de la mujer. Esta semana, tendremos que ser pacientes, puesto que el principal dato económico, los datos sobre el mercado laboral, no se publicarán hasta el viernes.
Otros mercados de divisas. El viernes, el banco popular de China intervino en los mercados de divisas e implantó el requisito de que los bancos que venden dólares a sus clientes utilizando contratos a plazo contarán con unas reservas del 20%, en un intento de frenar la depreciación de la moneda. Durante el fin de semana, algunas fuentes han informado de que el banco popular de China no permitirá que el yuan rompa el nivel de 7,00 frente al dólar, reforzando así el apetito del Banco Central de intervenir para evitar la huida de capitales. Con la amenaza de Trump de imponer nuevos aranceles sobre las importaciones chinas, los medios de comunicación estatales chinos informan de que Pekín se está preparando para una larga guerra comercial, lo que ha llevado al yuan a perder parte de las ganancias obtenidas este viernes.