En los últimos meses se ha reforzado la expectativa de que la demanda de cacao supere ampliamente a la producción en el corto-mediano plazo, resultando en un déficit cada vez mayor. Inclusive se dice que para el 2020 la demanda podría llegar a crecer un 30%, muy por encima de lo esperado para la producción que podría llegar a estancarse e inclusive caer como veremos más adelante. El siguiente gráfico muestra el superávit (déficit) de los últimos años y el estimado para la cosecha 2014/15.
Como la mayoría de los commodities, los principales drivers del precio del cacao podrían resumirse en la interacción entre la demanda y la oferta, condicionada esta última por factores climáticos y políticos, además de un componente sumamente determinante que son las expectativas del mercado.
En el siguiente gráfico se puede ver la evolución del precio por tonelada (en promedios mensuales). Luego de los déficit de las cosechas de los años 2006 a 2009 el precio alcanza un máximo en el último trimestre de 2009 para luego caer en línea con el superávit del 2010 al 2012. En 2013 también habíamos visto que el precio cambió su tendencia al alza y esto continúa hasta el momento.
¿Cuál es el panorama?
De acuerdo a un reporte publicado por la Fairtrade Foundation (una fundación que busca mejorar las condiciones de trabajo y términos de intercambio para los productores decommodities tales como cacao, algodón, azúcar, té, entre otros) las condiciones de trabajo, y por ende de vida, de los productores de cacao es muy precaria. Dada la volatilidad del precio en los últimos años, los pequeños productores no pueden prever cuánto recibirán por su producción. Esto sumado a varios otros factores tales como:
- La edad de los árboles de cacao (la vida productiva de los árboles es de aproximadamente 25 años).
- Enfermedades.
- Condiciones climáticas adversas provocaron que, en los últimos años, muchos productores abandonaran la actividad.
El panorama para el cacao es negativo (una producción cada vez menor) en tanto no cambien o se mejoren los incentivos en términos de condiciones de trabajo y principalmente inversión. Si bien durante el mes de agosto el precio cayó comparado con julio, si se analiza la evolución acumulada de los primeros 8 meses del año el precio creció de 2970 a 3147 dólares por tonelada, esto significa un incremento de 6%.
Perspectivas
Para lo que resta del 2015 se espera un efecto conjunto de una demanda relativamente débil por parte de Estados Unidos y China y una baja de los stocks existentes. Esto último podría resultar en un nivel de precios estables hasta el 2016, pero con gran potencial para los años siguientes.