En la semana que acabamos de finalizar hemos ido teniendo temores y oxígeno, buenas noticias y, acto seguido, malas. Aun así, los mercados de renta variable lograron cerrar en verde y los mercados de deuda pasaron sin historia.
Todo comenzó con un varapalo, cuando el presidente de China dijo que era pesimista en lo referente a las negociaciones con Trump por su política proteccionista. Días después, un respiro y balón de oxígeno afirmando lo contrario. Pero de nuevo otro varapalo: Rusia apoyaba el ataque químico a Siria y Trump reaccionaba diciendo que atacaría Siria con misiles. Acto seguido, rebajó el tono de sus palabras y dijo que el supuesto ataque no tenía que ser algo inminente, que podría demorarse bastante en el tiempo.
Por sectores, hemos tenido subidas en general en casi todas las áreas, llevándose la palma el sector de industria básica (+3,5%), apoyado por las subidas de algunas las materias primas, como el aluminio. También lo hizo bien el sector asegurador (+2,4%) y el sector energético (+2,2%) ayudado por el crudo, que cotizaba en máximos desde el año 2014, debido a las tensiones geopolíticas en Siria y Yemen.
Las actas de la Fed mostraban preocupación por la deriva de los acontecimientos proteccionistas entre Estados Unidos y China.
Las actas del BCE también reflejaban dicha preocupación, así como que el tema del Brexit pueda causar un daño económico mayor del esperado.
La semana que comienza presenta varios focos de atención:
- Evolución de las amenaza de EE.UU. a Siria y Rusia
- Evolución del enfrentamiento comercial entre Washington y Pekín
- El Libro Beige de la Fed
- Datos de ventas minoristas en EE.UU., producción industrial, permisos de construcción y el índice Fed de Filadelfia.
- Datos en Europa de IPC (Italia, Reino Unido y Zona Euro), el índice ZEW de Alemania.
- Presentan resultados BOFA, Goldman Sachs (NYSE:GS), Morgan Stanley (NYSE:MS), Netflix (NASDAQ:NFLX), Johnson & Johnson (NYSE:JNJ), General Electric (NYSE:GE), Novartis (SIX:NOVN), Sky, Ericsson (ST:ERICb).