Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
Tenemos una agenda económica muy ocupada esta semana, llena de acontecimientos relevantes, desde informes económicos, a una reunión de banco central y declaraciones de los principales responsables de política monetaria. La acción de los precios de hoy es una prueba de las posibles reacciones que pueden producirse fruto de la exasperación. Esto incluye las pronunciadas caídas de los dólares australiano y neozelandés, la lucha del euro para dejar atrás el nivel de 1,1400 y la caída del USD/JPY que ha hecho preguntarse a los inversores si el Gobierno japonés estudiará los tipos para una posible intervención y cuándo. Así que es tremendamente importante seleccionar entre la paja y centrarse en el puñado de acontecimientos que podrían tener un impacto realmente duradero en la divisa.
En cuanto al dólar estadounidense, los acontecimientos más importantes tendrán lugar durante la segunda mitad de la semana. No cabe duda de que el informe de mañana sobre el sector no manufacturero del Instituto de Gestión de Suministros provocará una brusca volatilidad en el dólar pero el informe sobre empleo no agrícola se publicó el viernes y la parte más interesante del informe sobre el sector servicios eran las orientaciones que ofrece en cuanto al empleo no agrícola.
Entre el relativamente sólido mercado laboral y el aumento de la actividad manufacturera, creemos que el informe será positivo para el dólar. Sin embargo, la gran pregunta que los inversores esperan que se responda esta semana es cuántos de los responsables de la política monetaria de Estados Unidos comparten la postura prudente de Janet Yellen sobre los tipos de interés y la economía. Nueve funcionarios de la Reserva Federal van a ofrecer declaraciones, y seis de ellos son miembros del FOMC con derecho a voto, incluida Yellen. Hoy ha comparecido Rosengren, que normalmente es uno de los más prudentes del banco central, e incluso él cree que las previsiones no son tan pesimistas como parece indicar el mercado y que la Fed podría tener que efectuar más subidas de los tipos de las que se han establecido.
Según los futuros sobre los fondos de la Fed, la postura de Yellen y la subida de la tasa de desempleo han provocado que los inversores descarten una subida de los tipos en 2016; esto no es sólo tremendamente pesimista sino que no concuerda con las dos subidas de los tipos de interés que se muestran en el gráfico de puntos de la Fed. Si otros responsables de la política monetaria comparten la visión de Rosengren, el dólar se recuperará pero si Yellen se mantiene firme y otros funcionarios de la Fed están ni fu ni fa, el billete verde registrará nuevos mínimos.
El par USD/JPY se acerca a territorio de intervención y, con el elevado nivel de tendencia alcista del yen y bajista del dólar, éste es el mejor momento para que intervenga el Banco de Japón. Sin embargo, los responsables de la política monetaria de Japón no han confirmado ninguna intervención hasta ahora, incluso aunque el USD/JPY ha experimentado picos inusuales cada vez que se ha situado por debajo del nivel de 111 durante los últimos dos meses. El ministro de economía, que toma las decisiones sobre la intervención, podría estar esperando algún indicio de estímulo fiscal por parte del primer ministro Abe. La semana pasada, éste anunció que está considerando la implementación de un nuevo paquete de medidas de estímulos antes de las elecciones de este verano. No cabe duda de que la economía necesita ayuda desesperadamente y el juego de esperar y esperar no puede durar mucho más. Sin embargo, si el USD/JPY se sitúa por debajo del nivel de 111, incluso si el Banco de Japón no interviene, que el banco central estudie los tipos podría bastar para que el USD/JPY se mantenga en su rango actual.
La atención se centrará esta noche en el dólar australiano, que ha experimentado su mayor caída en más de una semana. La culpa ha sido de unas cifras sobre ventas minoristas peores de lo previsto, aunque éstas se vieron eclipsadas por los datos sobre ofertas de empleo y concesión de licencias de obra. Aparte de la balanza comercial y el informe sobre el PMI del sector servicios, el Banco de la Reserva anunciará su decisión sobre política monetaria esta noche. Nadie espera que el Banco de la Reserva de Australia recorte sus tipos de interés pero sí hay cierta incertidumbre en torno a su conformidad con los últimos movimientos de la divisa. En el pasado, el banco ha expresado que preferiría que el par se acercara a los 65 centavos y ha descrito sus niveles actuales como “sobrevalorados” pero últimamente no hemos oído ninguna queja específica. Según la tabla que se muestra a continuación, se ha observado algo más de mejora que de deterioro en la economía australiana desde la última reunión sobre política monetaria, produciéndose un gran aumento de la actividad de los sectores manufactureros australiano y chino, lo que indica un pequeño golpe a la divisa de Australia. Si el Banco de la Reserva de Australia no hace mención específica a su deseo de ver devaluada su divisa, el AUD seguramente revierta sus pérdidas pero si expresan una nueva preocupación en torno a las fluctuaciones de la divisa, esto podría marcar el tope para divisa, que se encuentra actualmente por las nubes.
Los dólares neozelandés y canadiense también se han negociado a la baja con respecto al billete verde. El descenso del 3% de los precios del petróleo respalda el movimiento del dólar canadiense, mientras que el NZD ha descendido en solidaridad con el AUD. Ésta es una semana importante para el dólar canadiense pues se publicarán los datos sobre la balanza comercial, el PMI Ivey y las cifras sobre empleo. De entre estos datos, los más importantes serán los del mercado laboral, pero no perdamos de vista el petróleo porque, si desciende hasta situarse en menos de 35 USD por barril, el USD/CAD podría acercarse al nivel de 1,3200.
Nueva Zelanda celebrará su subasta de productos lácteos el martes y, aunque éste es el acontecimiento de riesgo más importante para la divisa neozelandesa esta semana, creemos que el interés por el riesgo y la demanda de AUD tendrán un impacto mayor sobre la divisa. Los datos sobre el PMI de China no deberían subestimarse porque el estado del sector servicios podría validar los crecientes indicios de que la ralentización de la economía china está disminuyendo finalmente.
El euro cerró la jornada sin cambios mientras que la libra ganó posiciones. Ambas divisas ofrecerán una gran actividad esta semana pues el Reino Unido publicará mañana los datos sobre el PMI del sector servicios y Mario Draghi comparecerá el jueves.
Los datos sobre la actividad del sector de la construcción superaron las expectativas, lo que contribuyó a impulsar la libra, pero seguimos creyendo que el denominado Brexit (salida del Reino Unido de la Unión Europea) supone un gran riesgo para la divisa y que ésta debería venderse en los repuntes. La actuación del euro por otro lado depende del tono de las actas del BCE y del presidente del banco central. Gran parte del motivo por el que el EUR/USD se ha disparado es que el BCE indicó el fin de los recortes de los tipos pero esta nueva actitud prudente podría desencadenar una nueva recogida de beneficios del par EUR/USD.