Análisis realizado al cierre del mercado estadounidense por Kathy Lien, directora general de Estrategia FX en BK Asset Management.
Los inversores han estado vendiendo euros desde principios de mes. Teniendo en cuenta que sólo llevamos seis jornadas de negociación, la racha es preocupante. La venta del par EUR/USD lo llevó hasta mínimos de cuatro meses, pero en realidad el mínimo de septiembre también es un mínimo de dos años y medio. El problema para el euro es que las previsiones están empezando a empeorar. La producción industrial de Alemania y las cifras de ventas minoristas de la semana pasada fueron poco alentadoras y esas cifras ni siquiera incluyen el impacto del coronavirus. Esta semana, obtendremos los datos de la eurozona junto con el PIB del cuarto trimestre de Alemania. No se espera que ninguna de estas cifras sea muy positiva y si éste resulta ser el caso, el par EUR/USD podría descender fácilmente por debajo de los mínimos registrados en septiembre en 1,0879. A principios de este mes, la presidenta del BCE, Christine Lagarde, expresó su preocupación por la baja inflación. Ignazio Visco, miembro del BCE y gobernador del banco central italiano, advirtió de los considerables riesgos para la frágil economía del país de este año. A los inversores les preocupa que Europa se vea duramente golpeada por la ralentización del crecimiento de China y los vínculos rotos con el Reino Unido en 2020. La recesión no está sobre la mesa (todavía), pero la mayor caída industrial de Alemania en décadas ha reavivado la preocupación de que el banco central tendrá que intensificarla o convencer a los distintos gobiernos de que proporcionen estímulos fiscales.
La pregunta candente en la mente de todos es cuánto más puede caer el euro. La preocupación y el miedo pueden ser poderosos impulsores de los flujos de divisas. La economía estadounidense es menos vulnerable al coronavirus que Europa y si se debilitara, sería desde una base más elevada. El presidente de la Fed, Jerome Powell, comparecerá ante el Congreso esta semana. Si mantiene una perspectiva positiva y resta importancia al impacto del virus, el dólar estadounidense debería ampliar sus ganancias, impulsando el EUR/USD hacia el nivel de 1,08. Esto supone que las cifras del PIB de la eurozona son discretas. Sin embargo, si Powell también indica que se avecinan riesgos importantes y aumenta la posibilidad de una nueva relajación monetaria, el EUR/USD subirá a pesar de las pésimas previsiones de la región. Según las últimas declaraciones de los presidentes de la Reserva Federal, los responsables de la política monetaria estadounidense no quieren precipitarse a la hora de juzgar el impacto del virus.
En cuanto al billete verde, los inversores deberían seguir de cerca las declaraciones de Powell, la inflación y las cifras de ventas minoristas. El dólar ha mostrado fortaleza, subiendo frente a todas las principales monedas gracias en parte a las nuevas subidas de las acciones de Estados Unidos. El viernes, la venta masiva planteaba preocupaciones en torno a un pico de las acciones, pero hoy los inversores tienen sus miras de nuevo en nuevos máximos. Aunque al gigante tecnológico Amazon (NASDAQ:AMZN) le va muy bien, ha informado de que sólo el 10% de Foxconn (TW:2354), uno de los mayores proveedores de Apple (NASDAQ:AAPL), ha reanudado su actividad, lo que es un problema para otros grandes nombres. Como señalaba nuestro colega Boris Schlossberg: "Incluso si la tasa de propagación mundial sigue siendo baja, el daño a China ha sido inmenso, perturbando tremendamente las cadenas de suministro globales, pero también en este sentido los inversores están adoptando una visión panglossiana de que las autoridades chinas podrán contener el virus y enviar de vuelta al trabajo a principios de marzo a la mitad de la población que ahora está en cuarentena. Si ése es el caso, el argumento alcista podría ganar, ya que los mercados darán por hecho que las autoridades de las partido comunista inundarán de grandes estímulos el mercado para reiniciar la economía y compensar la disminución de la producción". Ya veremos lo que dura.
La libra acaparará la atención este martes tras la publicación de las cifras comerciales y de producción industrial junto con la lectura del PIB del cuarto trimestre. Al igual que el euro, la libra ha seguido una tendencia a la baja este mes, pero encontró apoyo en la MMS de 100 días el lunes. Se espera que las cifras del PIB del cuarto trimestre sean más suaves, pero los economistas creen que la producción industrial se recuperará en diciembre. Teniendo en cuenta el debilitamiento del gasto de los consumidores hacia el final del año, el riesgo es a la baja para el informe de mañana.
Mientras tanto, el dólar australiano repuntó, mientras que los dólares canadiense y neozelandés descendieron ligeramente. Australia y Nueva Zelanda son las más vulnerables a una ralentización de China y la confianza empresarial de la NAB de esta noche podría darnos una idea de las preocupaciones locales. El Banco de La Reserva de Nueva Zelanda se reunirá a finales de esta semana y, a pesar de la mejora de los datos hacia finales del año pasado, se espera cautela por pare del banco central. El par USD/CAD registra máximos intradía de cuatro meses, ya que los precios del crudo han cerrado por debajo de los 50 dólares por barril por primera vez en más de un año.