El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, expresó el jueves la alta probabilidad de que el organismo, en su próxima reunión de política monetaria prevista para marzo, revise el plan de estímulo a la economía vigente.
El mismo consiste, por ahora, en la colocación de 60.000 millones de euros en el circuito económico, a través de la compra de bonos, hasta marzo de 2017. Sin embargo, Draghi fue enfático en aclarar que las condiciones de los mercados globales han empeorado desde la reunión de diciembre. Y no le falta razón: el petróleo se desplomó aún más de lo que lo había hecho durante todo 2015, y el inicio de enero volvió a generar un tembladeral en los mercados, con una nueva crisis en la Bolsa de China.
El euro quedó, entonces, a expensas de una mayor colocación de divisas en los mercados en los próximos tiempos, y paradójicamente podría no sufrir una baja mucho más importante solo si los mercados chinos no logran recuperarse. Al ser buscado como activo seguro, el euro se fortalece cuando afloran las crisis.
Sin embargo, el clima del viernes en los mercados luce más relajado. La Bolsa de China logró cerrar con ligeras ganancias, los futuros del índice Dow Jones recuperan parte de sus enormes pérdidas de la semana, y el petróleo logra posicionarse por encima de los 30 dólares, cubriendo de este modo un gap que había dejado en la zona de 31 dólares.
De este modo, tanto el euro como el yen pierden posiciones, al tiempo que las monedas vinculadas al petróleo también se alejan de sus mínimos de la semana. El dólar canadiense, por caso, recuperó más de 400 puntos desde su mínimo de 2003 que tocó en 1,4680, y tiene un soporte importante en 1,4245, 38,2% del último movimiento alcista del cruce USD/CAD.
A su vez, la libra esterlina quebró la dinámica bajista que traía desde los últimos días de diciembre, y ya ganó más de 240 puntos desde sus mínimos de marzo de 2009 que tocó el último miércoles, luego de las declaraciones del Gobernador del Banco de Inglaterra (BoE), Mark Carney, que dejó en claro que no habrá alzas de tipos de interés en los próximos tiempos.
Estos movimientos podrían extenderse a una sesión americana de viernes que no ofrece informes relevantes, pero en cuyo inicio, a las 9:30 del este, podría mostrar algunas correcciones favorables al dólar ante la libra y el dólar australiano -también muy recuperado en estas horas-, y una baja más importante del euro y el yen.