El mayor proveedor de soporte al crudo durante el pasado trimestre fue fuertemente superado ayer cuando los inventarios de crudo de EE.UU. aumentaron cerca de 2,39 millones de barriles frente a las expectativas de un dato mucho más conservador.
Los factores estacionales verán a los inventarios de EE.UU. comenzar a aumentar a finales de este trimestre, pero no se esperaban que lo hicieran tan pronto, y como resultado vimos en el crudo WTI su mayor caída en tres meses.
En una semana en la que el nuevo flujo de noticias en el mercado de crudo se ha centrado sobre todo en el aumento de la oferta, la reacción ahora está pesando fuertemente en los precios del crudo. El crudo WTI rompió por debajo del soporte previo en niveles de 58 dólares por barril, y por tanto, dejando por detrás un rango ajustado alrededor de los 60 dólares por barril, visto en los últimos días.
De acuerdo a las encuestas, la OPEP ha aumentado su producción de junio hacia los niveles no vistos desde 2012 (cortesía de la producción récord de Iraq y Arabia Saudí). Mientras tanto en EE.UU. el informe de la AIE anunciaba que la producción de abril tocó su mayor nivel visto en 1971.
La producción de EE.UU. se mantiene resiliente a pesar de la dramática caída en los precios el pasado trimestre. La capacidad continuada de mantener la producción, no obstante, puede continuar a desvanecerse.
(Esto es especialmente probable si vemos el precio del WTI asentado en un rango bajista desde que la industria de esquisto rompiera los niveles estimados que se apoyan cerca de los 65 dólares por barril).
Otro catalizador potencial para ver un giro bajista en la producción de EE.UU. podría llegar desde la ralentización de las ganancias en la cobertura del crudo antes de que el precio cayera, mucho delo cual están empezando a expirar.
Habiendo roto por debajo de 58 dólares por barril ayer, el crudo WTI ha conseguido, hasta ahora, encontrar soporte en 56,88 dólares por barril, el mínimo de mayo en el contrato CLQ5.
La tendencia bajista en este escenario parece limitada a 55 dólares por barril, lo que no obstante representaría cerca del 61,8% del retroceso del rally de marzo a mayo.
La gasolina se está manteniendo al alza a pesar de la debilidad en el crudo WTI. Como resultado, el crack del spread – o el beneficio generado de refinery un barril de crudo en gasolina – se mantiene saludable.
Tras un repunte del 13% la semana pasada, el spread negocia actualmente en 28 dólares por barril. Los fuertes márgenes de refinería garantizará la fuerte demanda de refinería por un largo tiempo, lo que podría llevar a que viéramos una reducción aún mayor de los inventarios antes de la desaceleración estacional a finales de este trimestre.