El mercado de divisas ha sido sólo levemente afectado por el fuerte retroceso del mercado de valores de los últimos días; lo mismo no puede decirse de los bonos. De hecho, parece que la reacción de pánico de los inversores se ha contenido, ya que los inversores abandonaron las acciones para correr hacia los bonos.
El lunes, los bonos del Tesoro estadounidense subieron fuertemente (sin importar el vencimiento) mientras que las acciones se vendieron masivamente. El rendimiento del bono soberano a 2 años de EE.UU. cayó 20 puntos básicos, hasta alrededor del 1,95%, el bono a 5 años cayó 26 puntos básicos, hasta alrededor de 2,35%, mientras que el extremo más largo de la curva de los bonos a 10 años, cayó 23 puntos básicos hasta el 2,65%. Con respecto a los mercados bursátiles, el S&P 500 perdió más de un 5%, mientras que el Dow Jones cayó un 6%.
Mientras tanto, el mercado de divisas reaccionó de manera muy limitada. Obviamente, el yen japonés se fortaleció mientras que el sentimiento de aversión al riesgo se extendía, pero la subida fue bastante limitada, ya que el USD/JPY cayó sólo un 1,60%, hasta 108,50, antes de estabilizarse en torno a 109,20.
Hoy, miércoles, los mercados financieros están todavía en modo de recuperación, con las acciones europeas operando en territorio positivo y los rendimientos del Tesoro escalando al alza. El índice VIX todavía está suspendido alrededor de 31, lo que sugiere que los inversores aún no han bajado la guardia. En el mercado de divisas, el dólar presenta más compras frente a todos sus pares, con la excepción del yen japonés. Creemos que es sólo una cuestión de tiempo antes de que los inversores renuncien a su posición de aversión al riesgo.
Después de todo, las estupendas perspectivas de inflación de EE.UU. y el sólido informe de empleo, dado a conocer el viernes pasado, sólo suman fuerza a esta retórica. Creemos que el dólar está sobrevendido en este momento y que es sólo una cuestión de tiempo antes de que el billete verde se recupere.