Tras el dato mejor que lo esperado de nóminas no agrícolas (NFP) del pasado viernes, uno podría haber esperado que subiera el dólar. Podría esperarse que los inversores compraran dólares contra todo lo demás. También podría haberse esperado que la mayor caída en los pedidos de las fábricas alemanas desde 2008 hubiera hecho bajar al euro.
De haber esperado todo esto, usted habría acertado desde el punto de vista teórico pero sería ligeramente más pobre. De hecho, el USD cayó frente a todas sus contrapartes del G10 y a casi todas las divisas emergentes que seguimos, sin ninguna razón obvia que yo pueda ver. Parece ajustarse a un patrón, que el movimiento de los días en que hay dato NFP se dé la vuelta el lunes siguiente.
Quizás fue por la buena respuesta de Brasil a las elecciones, o por el alivio de tensiones en Hong Kong, que trajo de vuelta cierta puja por las monedas emergentes (y por consiguiente, algunas ventas de USD). O quizás fue el giro respecto a la subida del viernes en los mercados de renta fija de EE.UU.; la tasa implícita en los futuros sobre fondos federales subió 3,5 pbs en el extremo largo este viernes, y bajó 4 pbs este lunes, lo que deshizo totalmente cualquier impacto del dato NFP.
Misma cosa en el extremo largo del mercado de bonos (aunque de todas maneras este apenas se vio impactado por el dato NFP). Tan sólo se me ocurre que tras 13 semanas consecutivas de compras de dólares, la gente se tomó la buena cifra de NFP como señal para recoger beneficios. La divisa de EE.UU. podría tomarse un respiro temporal aquí, pero no esperaría que cambiara su tendencia.
El Banco de la Reserva de Australia (RBA) ha mantenido sin cambios sus tipos de interés, como se esperaba de manera generalizada, y ha relajado el tono sobre el AUD tras su reunión del martes. El mes pasado dijo que la tasa cambiaria seguía “por encima de la mayor parte de estimaciones de su valor por fundamentales”. Este mes ha omitido esa frase y ha vuelto a decir que la tasa cambiaria “sigue alta conforme a los estándares históricos”, como ya había dicho antes en varias ocasiones.
De hecho, la OCDE estima que el AUD es la 3ª divisa más sobrevalorada del G10 (tras el CHF y la NOK), y la considera sobrevalorada en un 24%, a la baja desde una sobrevaloración del 29% en la fecha de la reunión de septiembre. Otras medidas de infra/sobrevaloración basadas en el IPC y el IPP estiman en este momento una sobrevaloración en torno al 20% (aunque el índice Big Mac la sitúa en el 15%, lo que indica que allí las hamburguesas son una gran ganga).
En cualquier caso, el RBA parece menos preocupado sobre el nivel de la divisa de lo que estaba antes. Los miembros del RBA habían señalado anteriormente la zona de los 0.86 como un nivel que podrían sobrellevar. Por consiguiente, ahora esperaría menos presión por su parte respecto de la tasa cambiaria. Esto contrasta con el Banco de la Reserva de Nueva Zelanda, que aún se queja amargamente sobre su tasa de cambio. Por consiguiente, esperaría que el AUD/NZD subiera desde su actual nivel.
El Banco de Japón (BoJ) ha mantenido su política monetaria sin cambios, como también se esperaba de modo generalizado. Llamado a testificar a mitad de la reunión ante la Dieta de Japón, su órgano legislativo, el gobernador del BoJ, Kuroda, dijo que el BoJ añadirá estímulo si se materializan los riesgos a la baja. Ya sabíamos esto, dado que lo ha dicho a menudo.
De acuerdo con Bloomberg, una mayoría de miembros en la junta de política monetaria del BoJ están a favor de abandonar la fecha tope de dos años para alcanzar el objetivo del 2% de inflación. Es difícil decir qué impacto podría tener esto en el yen. Por una parte, significaría que mantendrían su política monetaria relajada indefinidamente hasta que alcanzaran el objetivo.
Eso sería negativo para el JPY, ya que confirmaría al yen como moneda de financiación de referencia. Por otro lado, eliminaría la necesidad de que el BoJ incrementara el estímulo al irse aproximando la fecha tope, lo que sería positivo para el JPY.
En este momento, el mercado asume que incrementarán sus estímulos en enero a fin de cumplir con la fecha tope de abril para la inflación del 2%. Personalmente, creo que el mercado tiene en mente vender el yen, y que cualquier cosa que suceda se interpretará como algo negativo para la divisa.
Indicadores para hoy: Durante la jornada europea tenemos cifras de producción industrial en agosto desde Alemania, Noruega y el Reino Unido. La cifra alemana cayó más de lo esperado, lo que añade evidencias de estancamiento en la que se supone es la locomotora del crecimiento en Europa.
En el Reino Unido, se espera que la cifra quede sin cambios con respecto a julio y desde Canadá se espera que las licencias de construcción de agosto caigan, lo que supondría un giro respecto a los resultados de julio.
En EE.UU., el único indicador que tenemos es el informe de la Encuesta de Ofertas de Empleo y Rotación Laboral (JOLTS) de agosto, y el pronóstico es que el número de ofertas de empleo se incremente marginalmente. Aunque este indicador no ejerce un impacto destacado en el mercado, se suma al balance positivo del informe de empleo publicado el pasado viernes.
Tenemos dos comparecencias de la Fed en la agenda del martes, de dos defensores de la relajación monetaria: el presidente de la Fed de Mineápolis, Narayana Kocherlakota, un fuerte defensor de esta postura y el presidente de la Fed de Nueva York, William Dudley, un defensor moderado.
El mercado
El EUR/USD rebota desde los 1.2500
El EUR/USD presionó al alza el lunes tras encontrar un fuerte soporte en la línea psicológica de los 1.2500 (S1), mientras que el billete verde hacía una pausa tras su fuerte remontada del viernes. El par encontró algunas órdenes de compra cerca de una zona psicológica, y además veo divergencia positiva entre la acción del precio y nuestros dos indicadores de impulso de corto plazo
Por consiguiente, cambio mi punto de vista a neutral por el momento. Además, el RSI cruzó al alza su línea 50, mientras que el MACD, aunque negativo cruzó al alza su línea de activación, lo que me da más razones para mantenerme al margen y esperar.
Sin embargo, en el gráfico diario, la estructura del precio sigue siendo de máximos y mínimos decrecientes por debajo de las medias móviles de 50 y de 200 días, por lo que yo mantengo mi opinión de que la trayectoria general sigue siendo a la baja y consideraré el reciente avance o cualquier extensión del mismo como una fase correctiva antes de que los bajistas prevalezcan de nuevo.
• Soportes: 1.2500 (S1), 1.2465 (S2), 1.2385 (S3).
• Resistencias: 1.2693 (R1), 1.2760 (R2), 1.2820 (R3).
El GBP/JPY sigue apoyado en la zona de los 174.50
El GBP/JPY se movió el lunes en lateral y se mantuvo apoyado en la zona de los 174.50 (S1). Con eso en mente, y dado que nuestros estudios de impulso apoyan un posible rebote, por el momento me mantendría al margen. El RSI rebotó desde cerca de su línea 30 y apunta un poco hacia arriba al tiempo que el MACD, aunque en negativo, cruzó al alza su línea de activación. También veo divergencia positiva entre el RSI y la acción del precio.
En un marco temporal más amplio, el par sigue por encima del techo de la formación de ensanchamiento confirmada el 11 de septiembre, y por encima de las medias móviles de 50 y 200 días. Por consiguiente, consideraré que el escenario general es cautelarmente alcista y veré la onda bajista entre el 19 de septiembre y el 6 de octubre como un movimiento correctivo.
• Soportes: 174.50 (S1), 173.00 (S2), 171.55 (S3).
• Resistencias: 176.00 (R1), 177.00 (R2), 178.50 (R3).
AUD/USD
El AUD/USD repuntó el lunes al alza tras encontrar soporte en la zona de los 0.8640/60. La reunión del RBA de hoy no ha cambiado radicalmente la situación, y el par se ha mantenido entre esa zona de soporte y la resistencia de los 0.8830 (R1). Dado que el par rebotó con fuerza cuando alcanzó la zona de los 0.8640/60 el pasado enero y le dio la vuelta a su tendencia, y dado el hecho de que aún veo divergencia positiva entre el par y nuestros osciladores, creo que hay suficientes motivos como para mantener mi postura neutral, al menos en lo que concierne al horizonte de corto plazo.
En el marco temporal más amplio, la tendencia general sigue siendo bajista en mi opinión, pero preferiría aguardar una pérdida de la línea de los 0.8640 (S2) antes de fiarme de nuevo de la tendencia bajista. Si, y cuando, el par realmente se mueva por debajo, yo esperaría que el objetivo inicial de los vendedores fuera nuestro siguiente soporte en los 0.8565 (S3).
• Soportes: 0.8660 (S1), 0.8640 (S2), 0.8565 (S3) .
• Resistencias: 0.8830 (R1), 0.8920 (R2), 0.9000 (R3).
El oro encuentra órdenes de compra en los 1183
El Oro disparó algunas órdenes de compra en el soporte de los 1183 (S1) y rebotó hasta encontrar resistencia marginalmente por debajo de la línea de los 1210 (R1). En el gráfico diario, la estructura del precio aún sugiere una tendencia bajista. La última vez que vimos al metal cotizarse por debajo de los 1180 (S2), mínimo del 28 de junio de 2013, fue en agosto de 2010
En junio y diciembre de 2013, cuando los bajistas alcanzaron la zona de los 1180/83 el metal rebotó con fuerza y giró su tendencia. Si tenemos ese rebote en mente, yo mantendría mi “postura de esperar y ver”. Creo que tan sólo un movimiento decidido por debajo de los 1180 (S2) señalaría la continuación de la trayectoria bajista.
En ese caso, esperaría extensiones hasta los 1156 (S3), mínimos del 27 de julio de 2010. Por arriba, la ausencia de cualquier signo alcista de vuelta de tendencia hace que sea prematuro esbozar cualquier escenario alcista, en mi opinión.
• Soportes: 1183 (S1), 1180 (S2), 1156 (S3).
• Resistencias: 1210 (R1), 1223 (R2), 1235 (R3).
El WTI, ligeramente por encima de los 90.00
El WTI se movió el lunes marginalmente al alza y volvió a cruzar por encima de los 90.00, pero encontró fuerte resistencia en los 90.75 (R1). Aún hay posibilidades de un máximo decreciente cerca de esa zona, por lo que veo un escenario general cautelarmente negativo y aún veo probable otro ataque cerca del mínimo del jueves en los 88.15 (S1).
Sin embargo, tan sólo la pérdida de esa línea confirmaría un próximo mínimo decreciente en el gráfico diario y señalaría la continuación de la tendencia bajista de más largo plazo. Dicho movimiento podría dar margen a nuevos descensos, quizás hasta nuestro siguiente soporte en los 86.00 (S2). Nuestros dos estudios de impulso diarios indican impulso bajista. El RSI queda por debajo de 50 al tiempo que el MACD, ya en negativo, pasó a la baja su línea de señal.
• Soportes: 88.15 (S1), 86.00 (S2), 84.15 (S3).
• Resistencias: 90.75 (R1), 91.80 (R2), 93.00 (R3) .