El metal precioso caía cerca del 1,5% en la sesión del miércoles profundizando sus caídas tras la apertura de Wall Street.
El metal ha mostrado fuertes señales de debilidad de largo plazo cotizando en un amplio rango limitado al alza por la zona de los US$1.800 y a la baja por el soporte de los US$1.530 la onza.
Tras fallar en su tercer intento por superar la barrera de los US$1.800, el oro ha caído con bastante fuerza, entregando claras señales de daño técnico de corto y mediano plazo.
Sin embargo, una vista más amplia del metal, analizando el gráfico Weekly, muestra un importante nivel de soporte en torno a la zona de los US$1.530 la onza, representado por la media móvil simple de 150 semanas. Este indicador entregó un importante soporte en la corrección del oro el año 2008, limitando caídas mayores y gatillando en torno a la zona de los US$720 la onza una fuerte presión compradora.
En el corto plazo esperamos una caída libre del metal amarillo en busca de la zona de soporte de los US$1.530, dónde podríamos ver un fuerte rebote por compras de oportunidad y cierres de posiciones cortas.