En medio de un clima enrarecido, con la bolsa de China como eje de un temor generalizado entre los inversores, se desarrolla la sesión europea del martes. Los índices bursátiles del Viejo Continente, que cerraron el lunes con fuertes pérdidas -al igual que los índices de la bolsa de Nueva York-, vuelven a mostrar cifras negativas el martes, aunque las bajas asoman más atenuadas en la fecha.
En este contexto, el dólar se fortalece en todos los frentes. El lunes había perdido posiciones ante el euro y el yen, ante la incertidumbre que generó en un primer momento la crisis de China. Pero se recuperó, y lo sigue haciendo, en especial ante la divisa única, que llega a su mínimo desde el 3 diciembre, día en que luego de las declaraciones del presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi, ganó 500 puntos.
El yen, en cambio, se mantiene algo más firme, y si bien luce sobre comprado, aún no hay señales de cambio de tendencia de corto plazo. La libra Esterlina, por su parte, vuelve a caer, esta vez a niveles del 13 de abril pasado, y su baja no tiene por ahora signos de frenarse. Esto, pese a que el PMI de la construcción en Reino Unido, dato que suele impactar en la libra, arrojó cifras mejores a las esperadas.
También cae nuevamente el dólar canadiense, ante la baja del petróleo, que luego de insinuar una lenta recuperación la semana pasada vuelve a mostrarse débil desde el lunes. El loonie tiene objetivo inmediato en 1,4005, mínimo de 11 años y medio que tocó a mediados de diciembre, y puede perder dicha cota en las próximas horas.
En tanto, la onza de oro se recupera ligeramente, con una tendencia alcista en el gráfico de 4 horas, aunque tendrá una firme resistencia en la zona de 1080 dólares, desde los 1077,40 actuales.
Si bien el año recién comienza, el dólar podría perfilarse al alza en todos los frentes en los próximos tiempos, teniendo en cuenta que crecen los rumores acerca de alzas de tipos de interés por parte de la Fed durante el resto de 2016. En nuestra opinión, habrá al menos tres movimientos en los ocho encuentros previstos para el año. Y con el dólar más caro desde la propia Fed, y la mayoría de los bancos centrales inyectando divisas, es sencillo deducir que la moneda norteamericana ganará la contienda.