El EUR/USD tuvo un día de calma el jueves y se movió entre dos niveles importante de corto plazo. Se mantuvo por encima de 1.2500 y por debajo de 1.2600 (en realidad de 1.2570).
La salida del rango entre 1.2500 y 1.2570 podría ofrecer oportunidades de corto plazo en dirección del quiebre. Aunque en el gráfico se puede ver la proximidad de la cotización a una línea de tendencia bajista, que cruza actualmente por la zona de influencia de 1.2600, dándole más relevancia al nivel actual de cotización.
El quiebre y una consolidación por sobre esta línea podría abrir las puertas a una recuperación más relevante, con una posible expansión hasta 1.2730.
Pero de no poder superar dicho nivel habrá que estar alerta a las posibles señales de retroceso, ya que la tendencia dominante sigue favoreciendo al dólar.
En el aspecto fundamental, no ha habido cambios, sino que por el contrario las diferencias se siguen expandiendo. El reporte de PMI de la Eurozona (preliminar de noviembre) no fue positivo y si bien estuvo por encima de 50 (debajo hubiera marcado una contracción), la realidad es un estancamiento económico, que preocupa.
Por su parte, en Estados Unidos, la economía sigue en la senda de la recuperación, lenta, pero continua; incrementándose las diferencias en las expectativas de política monetaria.