Como se puede apreciar en el gráfico, el cruce se está moviendo con un sesgo alcista y mantiene además el mismo tono en gráficos mayores, pero ya dando señales de agotamiento o de cansancio. Desde hace tres días que no marca nuevos máximos y está teniendo dificultades en sostenerse por encima de 1,23.Para continuar el rally alcista el par parece estar necesitando un empujón.
En el corto plazo, el quiebre de la línea de tendencia, que en estos momentos cruce por la zona de 1,2280 debería de debilitar al euro y favorecer un retroceso mayor, con objetivos en 1,2245 y 1,2225.
Si el par logra sostenerse por encima de la línea de tendencia podríamos esperar una continuidad alcista. Una consolidación por encima de 1,2330 abriría las puertas a un nuevo recorrido favorable para el euro, incrementando las probabilidades de llegar a 1,24.
Se espera un elevado nivel de volatilidad en los próximos días. Para tener en cuenta, hacia el alza, una de los nieles a considerar se localiza en torno a 1,24 donde cruce una importante línea bajista. El quiebre de la misma favorecería nuevas subas para el euro (o al menos el establecimiento de un piso, al menos temporario). Mientas que hacia la baja, por debajo de 1,2150 las presiones bajistas se intensificarían, poniendo en riesgo 1,20.